Bangkok. Su exmarido y popular presentador de televisión, Francisco Javier Cuesta, más conocido con el sobrenombre de "Frank de la jungla", asegura que se trata de una conspiración urdida por un policía corrupto al que implicó en el tráfico ilegal de animales.
"Hoy se cumple un año desde que Yuyee está en la cárcel. Lo básico, Yuyee no tomaba drogas (la policía no pudo presentar un análisis positivo de orina), no llevaba drogas (la policía no pudo probar que había droga en el aeropuerto)", indicó la estrella televisiva en Facebook.
"Yuyee está sentenciada 15 años de cárcel por traficar con 5 miligramos de cocaína (35 céntimos de euro). Ni en Tailandia ni en ningún otro país ha habido JAMAS una sentencia así", agregó el presentador.
"La razón de que Yuyee esté en la cárcel es pura venganza por interceptar un leopardo que iba a un alto cargo policial del país. Perfecta sintonía... policía, fiscal (policía) y juez", espetó.
El presentador, quien visita con asiduidad el centro penitenciario de mujeres de Bangkok, ha incidido en el deterioro físico y psicológico que sufre Yuyee desde que ingresara en la cárcel.
Las "inhumanas" condiciones de confinamiento en una celda saturada junto a otras presas o el no poder mantener contacto físico con los cuatro hijos que comparte con el presentador han hecho mella en la tailandesa.
Fuentes del penitencial donde se encuentra Yuyee confirmaron a Efe la situación de sobrepoblación que registra el recinto.
Yuyee, exmodelo de 41 años, fue detenida en noviembre de 2012 en el aeropuerto internacional de Don Mueang, en el norte de Bangkok, tras regresar de un viaje a Vietnam y entre sus pertenencias las autoridades requisaron 212 miligramos de cocaína, según las primeras informaciones.
Según la sentencia, a la que tuvo acceso Efe, Yuyee aceptó en un primer momento los cargos al ser aconsejada por un policía de que la pena sería ligera, sin embargo, durante el juicio posterior la acusada rechazó que la cocaína fuera suya e indicó que una desconocida le dio un tubo de chocolatinas donde se encontraba la droga en el baño del aeropuerto tras encontrarse indispuesta.
La cantidad de droga disminuyó a 5 miligramos durante el proceso judicial ya que, según las autoridades, los medidores de varias comisarías no funcionaban en el momento de la detención.
Las sustancias fueron enviadas en un sobre a un laboratorio para su estudio, que después la destruyó durante los análisis.
A los 15 años de prisión y una multa de 1,5 millones de bat (unos 40.000 euros) al ser hallada culpable de tráfico de droga, se suman 3 meses de cárcel por una sentencia anterior al no poseer los permisos necesarios para mantener animales salvajes en su domicilio.
Cuesta ha denunciado en los medios y redes sociales la manipulación de las pruebas y las irregularidades durante el juicio, que achaca a la profunda "corrupción" de algunas personas en las instituciones judiciales tailandesas.
Los jueces también han denegado una y otra vez la petición de libertad condicional a la reo, incluso alegando que uno de sus hijos sufre un problema cardiaco que necesita asistencia diaria.
Hasta el próximo diciembre la defensa no podrá presentar una nueva apelación a la condena.
La justicia tailandesa castiga con severidad el tráfico de droga, sin contemplar como atenuante el consumo propio o el menudeo, para frenar a las mafias que comercian en su mayoría con metanfetamina y heroína.