Donostia - Resulta difícil precisar cuándo comenzó el culto a la figura de Mikel Laboa (Donostia, 1934-2008), aunque a diferencia de otras leyendas de la música, la suya comenzó a forjarse cuando aún le quedaban muchos años de vida... y de carrera. Recién estrenados los años 90 del siglo pasado, grupos como M-ak, Delirium Tremens o Negu Gorriak se reunían para publicar Txerokee. Mikel Laboaren kantak, un disco de versiones de Laboa reinterpretados en clave de rock, rap, folk u otros estilos.
Desde entonces, los homenajes han sido constantes en ámbitos musicales, teatrales, audiovisuales o artísticos. Fueron varios los premios que recibió en vida y han sido también numerosos los otorgados a título póstumo. El sábado 21, Día de la Música, su familia recogerá el último, el Adarra Saria, distinción recién creada por el Ayuntamiento de Donostia para reconocer la trayectoria de figuras clave de la euskal musika.
La gala se realizará en el Victoria Eugenia, donde a partir de las 19.30 actuarán antiguos colaboradores de Laboa, como el pianista Iñaki Salvador o el saxofonista Josetxo Silguero, a quienes se unirán la vocalista Ainara Ortega y Kukai Dantza Taldea. Finalmente, Delorean ofrecerá una actuación especial que mezclará la voz de Laboa con ritmos electrónicos.
Una fórmula distinta Por tanto, la banda zarauztarra afincada en Barcelona es la última en sumarse a la lista de reconocimientos al fallecido genio. A diferencia de otros homenajes, que llevaban los temas del artista al terreno del rock, el pop o el jazz, Delorean ha optado por una fórmula distinta y por un estilo que parece totalmente opuesto. "Al principio pensamos que sería un poco difícil acercarse a él porque su música y la nuestra son muy diferentes, así que decidimos no hacer versiones, sino remezclar sus canciones", explica Ekhi Lopetegi, vocalista y bajista de Delorean. Ciertamente, el grupo tiene amplia "experiencia" en el campo de las remezclas de artistas como The XX, Franz Ferdinand, El Guincho o Russian Red -la más reciente-, todos ellos referencias actuales de la música indie. ¿Pero cómo aproximarse a un mito de la cultura vasca como Laboa?
La discográfica Elkar les cedió "cortésmente" las pistas individuales de las grabaciones del donostiarra y ellos las utilizaron para hacer su "propia adaptación" de varias canciones. "La voz de Mikel se sigue escuchando, pero adaptada a nuestras canciones y al estilo de Delorean", afirma el músico. Obviamente, y como no podía ser de otra forma, el resultado es "muy electrónico". Sobre el escenario, Ekhi, Igor (batería), Guillermo (guitarra) y Unai (teclados) cambiarán la instrumentación que suelen llevar en directo y utilizarán sonidos pregrabados en ordenador.
En total, el set de Delorean durará 40 minutos e incluirá remezclas de varios temas de Laboa que Lopetegi no quiere desvelar. "Solo diré que sonará Bentara noa, pero no diré más: me apetece guardar el secreto y mantener la intriga hasta el final porque va a ser muy especial", advierte, expectante por cómo el público acogerá la propuesta. "Es un evento que se escapa de nuestra zona de confort? Actuaremos en el Victoria Eugenia, un escenario que supone un reto para nosotros, y lo haremos después de músicos que colaboraron con Laboa. También nos da respeto pensar en cómo recibirá el público las remezclas, pero las hemos hecho de corazón: lo mejor que podíamos", asegura. Sostiene Ekhi que jamás se habían acercado a Laboa pero, por supuesto, conocen su trabajo desde siempre. "Para hacer las remezclas nos hemos zambullido en toda su obra y le hemos redescubierto en una experiencia refrescante", agradece el zarauztarra, que tiene su propia opinión sobre por qué Mikel Laboa ha sido, es y será una referencia para toda la escena musical vasca al margen de estilos y edades: "Tenía una voz propia -eso es fundamental- y era valiente. Su obra es colosal, no solo recuperó la canción tradicional vasca, que estuvo en trance de perderse en aquella época, sino que mantuvo una actitud experimental, con un pie siempre metido en la vanguardia. Aquellos juegos fonéticos suyos solo podía hacerlos una persona valiente? Era un artista con A mayúscula". Aunque registrar esas remezclas en un disco o subirlas a Internet podría ser una buena idea para socializar este particular homenaje a Laboa, de momento no hay planes al respecto. "No sé si en el futuro nos lo plantearemos o no, pero quizá quede todo en un solo concierto", aventura Ekhi.