Llodio - Tiene 23 años, es alumno de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del País Vasco en Leioa, y no ha querido desaprovechar la oportunidad de exponer sus creaciones que le ha brindado la sala Drumgorri de su pueblo, Llodio. Hablamos del artista Christian Gil Moncada (Gasteiz 1991) quien, desde el lunes y hasta el próximo 10 de mayo, esta intentando ofrecer una visión de la localidad alavesa de estos últimos años, a través de la fotografía, que se basa en el desarrollo de nuevos formatos expositivos.

Según sus propias palabras, "es una vista llodiana de un llodiano con sus curiosidades hacia lo contemporáneo y el tiempo que rige, siendo al mismo tiempo documental". Y es que se trata de once imágenes tomadas en el municipio, pero no convencionales, puesto que "partiendo desde la Nueva Geometría, el estudio de espacios como el constructivismo, y disposiciones en distintos formatos, así como por el camino del arte conceptual, muestro estos pequeños estudios con fotografía, que me sirven tanto para ordenar los elementos como para plasmar el Llodio del último lustro, aunando la parte personal y un estudio con pruebas", explica. El objetivo no era lograr una fusión de estilos, sino "algo que me permitiera avanzar en mi búsqueda por un campo nuevo, algo que ya desarrollo en dibujo, pintura y, en menor medida, en escultura; y ahora en foto, en esta exposición, que es un paso pequeño dentro de ese trabajo usando a Llodio como musa", sentencia Gil Moncada.

Espacio multidisciplinar Que la sala Drumgorri de Llodio no es un espacio cerrado a la música, pese a que ésta sea el motivo de su existencia, lo saben muy bien todas las personas que han pasado por sus instalaciones desde su apertura en febrero de 2011. De hecho, sus propietarios -Rafa Gutiérrez y Uxue González- no es la primera vez que ceden la instalación a la muestra de otras expresiones artísticas como la pintura, u otras actividades tales como fiestas solidarias o mercadillos para dar a conocer el trabajo de jóvenes emprendedores de la comarca.

La siguiente cita tendrá lugar, a partir de las 18.00 horas del 10 de mayo, y consistirá en un torneo rápido de futbolín, acompañado de una barbacoa gratuita. No obstante, Drumgorri Aretoa es ante todo un centro integral de música que sigue adelante con su escuela, y servicio de alquiler de aulas de estudio y locales de ensayo; así como con una sala-bar para actuaciones en directo, con un aforo para cien espectadores, que funciona de lunes a sábado a partir de las 15.00 horas (los domingos está cerrado).

Los viernes y sábados permanece abierta hasta las cinco de la madrugada, ya que son los días en que se ofrecen conciertos, de la mano de formaciones musicales de todos los estilos que encuentran en este rincón del Valle de Ayala -ubicado junto a la estación de tren de Santa Cruz de Gardea en Llodio- una auténtica pista de despegue. El próximo en aterrizar, a las 22.30 horas del 9 de mayo, será el ritmo sleaze-hard rockero de los valencianos Jolly Joker, que al día siguiente proseguirán su gira Sex, Booze and Tattoos en la sala Ibu Hots de Gasteiz. A ellos les seguirá una noche de boleros con el grupo local Aldaiko, el día 23; así como las formaciones Penadas por la Ley (día 24) y Ero y Betileit (día 31). El programa de conciertos de Drumgorri seguirá el 7 de junio con los grupos Kuenta Atrás y Bloque H.