Bilbao- "Nunca sabremos cómo sería ahora Kurt Cobain si siguiera vivo, ¡a lo mejor se hubiera vendido! Pero, hasta el día en que murió, creo que fue una persona muy consecuente con todo lo que decía, y con Nirvana reflejó cómo se sentía la juventud de la época: desesperanzada", opina la periodista Estibaliz Sainz.

Kurt Donald Cobain, nacido el 20 de febrero de 1967 en la localidad estadounidense de Aberdeen (Washington), siguió la máxima del rock and roll -vive deprisa-, lideró el movimiento musical grunge, fue símbolo de la Generación X y a los 27 años entró a formar parte del club maldito junto a Janis Joplin, Jim Morrison o Jimi Hendrix, entre otros. Dejó viuda a Courtney Love, líder de Hole y con quien tuvo una hija, Frances Bean Cobain.

El divorcio de sus padres y una infancia tormentosa hicieron de Cobain un chico "depresivo y antisocial". Formó Nirvana junto a su amigo Krist Novoselic, a quienes en 1988 se uniría Chad Channing como batería (después sería sustituido por Dave Grohl). Bajo el sello Sub-pop, su primer disco Bleach vio la luz en 1989, pero fue Nevermind el trabajo que marcó un hito en su carrera y en la historia del rock. Después vendrían Incesticide (1992), In Utero (1993) y el acústico (póstumo) MTV Unplugged in New York (1994). Éxitos como Lithium, Come as you are o Smells like teen spirit "no han envejecido nada mal", subraya el músico Roberto Moso.

El pasado día 10, la localidad de Hoquiam, en Washington y próxima a su Aberdeen natal, declaró el Día de Nirvana. El mismo día, la banda se hizo un hueco en el Rock and Roll Hall of Fame, junto a Kiss y Cat Stevens.

Hace 20 años, el 5 de abril de 1994, atrincherado en su casa de Seattle y tras consumir heroína, Cobain se pegó un tiro en la cabeza. "? Ya no me queda pasión. Recordad: es mejor quemarse que apagarse lentamente. Paz, amor, empatía. Kurt Cobain", se despidió en una nota. - A.S/Efe.