londres - Rebekah Brooks, la más poderosa ejecutiva de la prensa británica hasta el debacle de las interferencias en las comunicaciones privadas de famoso, fue absuelta ayer de uno de los cinco cargos que le imputa la Fiscalía. El jurado ratificó el veredicto de inocencia que acababa de solicitar el juez John Saunders por falta de pruebas convincentes. - Dna