BARCELONA. La ganadora del Planeta había ocultado su nombre tras el seudónimo de José Calvino y el título ficticio de su obra era "La dama del hechizo", mientras que la finalista de este destacado premio literario es la guionista y cineasta Ángeles González Sinde, que se escondía tras el seudónimo de Salvador Durán, por la novela "El buen hijo".
La novela ganadora se centra en Patricia una exitosa modelo de pasarela que descubre que la terrible revelación que una vidente le hizo tiempo atrás se convierte en realidad: alguien desea su muerte y le hace la vida imposible.
Clara Sánchez ha confesado en la conferencia de prensa que "esta novela habla de la desconfianza y, sobre todo, de hacia dónde nos puede llevar un sentimiento tan potente como el que nos domina ahora mismo, al menos, a una gran parte de nosotros, que ya no podemos depositar nuestra fe en personas como el director de la sucursal bancaria de la esquina".
Según Sánchez, a través de Patricia ha podido recorrer una aventura como las que a ella le gustan: "las aventuras humanas en las que la psicología de la persona se pone en funcionamiento porque en su vida sucede algo imprevisto y se desata unos mecanismos psicológicos para abordar esa nueva realidad que se le viene encima".
Ha confesado la autora que el personaje surgió después de mirar una revista de moda en la peluquería, en la que encontró a una chica posando de esa manera lánguida, pero el alma, el espíritu, siempre encuentra resquicios por donde escaparse y "a esa chica le noté en la mirada algo extraño, estaba asustada".
A partir de esa imagen, Sánchez se interrogó sobre qué le ocurría en su vida a la joven modelo: "Hay veces que los medios de comunicación no dan voz a personas visibles, por ejemplo Kate Moss, que es la culminación de la imagen, pero casi nadie sabe lo que piensa, cuál es su vida".
En la velada literaria, Clara Sánchez se ha acordado de su padre, que falleció este año, de la premio Nobel Alice Munro y de Ana María Matute, "una escritora española que es muy buena y que también lo merece".
En la novela, que tiene una cierta trama de thriller, Patricia "lucha por situarse en el universo, por saber quién es. Empieza a ver a su familia de otra manera, a detectar que hay personas en su alrededor que la están vampirizando y se fija en cosas en las que yo no me fijaría".
"A los vampiros de hoy, más que la sangre, lo que les gusta son las neuronas", asegura.
A pesar de que la protagonista se mueve en el mundo de la moda, la ganadora del Planeta advierte que no se trata ni de una crónica ni de un ensayo sobre la moda, y ha tratado de "ahondar en una persona que tiene un tipo de vida, y que de pronto tiene que fijarse en otras cosas".
Todo gira en torno al amor, resume la autora, quien no ha querido desvelar el desenlace de su novela, pues la protagonista debe averiguar quién de esas personas de su alrededor no la quiere.
La novela, añade Sánchez, también habla del trabajo, de la competencia, porque "al final, no somos tan diferentes ni por el trabajo, ni por la vida que llevamos".
En la misma presentación, la ex ministra de Cultura y finalista del premio Ángeles González-Sinde ha explicado que con la novela "El buen hijo" ha recuperado la escritura, que había echado de menos en su período como ministra entre 2009 y 2011.
Ha confesado que había comenzado la novela hacía unos años y que encontró la voz adecuada y ésta empezó a ser cada vez más poderosa; y al mismo tiempo recuperó la literatura infantil, con una cuarta novela de una serie que ya tenía tres entregas.
Si con su primera novela infantil se presenté a un premio, el Edebé, con esta primera novela de adultos decidió hacer lo mismo "con la finalidad de que llegará al mayor número de lectores".