Vitoria. Fue el pasado 21 de marzo cuando Jabier Muguruza pisó por última vez un escenario en la capital alavesa. En aquella ocasión lo hizo de la mano de Bernardo Atxaga sobre las tablas del Principal para presentar el espectáculo Paradisuaz. Hoy, el músico regresa. Lo hace, eso sí, en un marco y en un formato diferentes.
En concreto, la cita con los espectadores se producirá a las 20.00 horas en la Casa de Cultura Ignacio Aldecoa, un espacio en el que Muguruza ya ha dejado discurrir sus sonidos en alguna ocasión anterior, como sucedió en 2010. Por aquel entonces todavía no había salido al mercado su último trabajo discográfico, un Bikote bat que vio la luz en 2011 y que es la excusa perfecta para este regreso.
En esta obra, el ambiente intimista que siempre ha caracterizado la trayectoria del autor es llevado al extremo: sólo un piano, ejecutado por Mikel Azpiroz, y la voz y acordeón de Muguruza, aderezados por las puntuales intervenciones de la vocalista Mireia Otzerinjauregi.
Se trata de canciones que parten de textos de grandes poetas vascos, convertidos ya en colaboradores habituales del artista, como el mencionado Atxaga, Iñaki Irazu, Harkaitz Cano (que en breve visitará la capital alavesa por partida doble), Gerardo Markuleta o José Luis Padrón, a los que se suman para la ocasión Lourdes Oñaederra, Rikardo Arregi y, en castellano, Javier Rodríguez Marcos.
A ello, en el disco se añade la colaboración especial del cantante norteamericano Jackson Browne. El resultado es la obra más madura del músico de Irún, con un destacado nivel compositivo y literario, como podrán comprobar en primera persona quienes acudan a su encuentro esta tarde en el salón de actos de la biblioteca de la Florida.
Tras su paso por la capital alavesa, Muguruza seguirá camino con este trabajo, una senda que dentro de nada le llevará también a actuar a Marruecos.