Vitoria. Nació, creció y se ha desarrollado entre conflictos, broncas, estallidos y encontronazos. A cada pelea, un paso hacia adelante. Y teniendo en cuenta la afición del ser humano por meterse en problemas cada dos por tres, el futuro que le espera no puede ser más esperanzador. A más guerras, mejor le irán las cosas. Al euskera le va la marcha.

No es que todo lo anterior sea producto de un delirio. Bueno, sí lo es pero tiene su razón de ser. Se trata, a grandes rasgos, de la premisa básica de un espectáculo que tras pasar por la última edición del festival de Teatro de Humor de Araia regresa este jueves a tierras alavesas, Lingua Nabajorum.

Dos actores, un buen número de diferentes personajes, una decena de sketchs y un idioma como el euskera son los ingredientes que componen la última locura de Ez Dok Hiru (bajo la dirección de Jokin Oregi), una propuesta cargada de humor, ironía y absurdo con la que Mikel Martínez y Patxo Tellería (ganador, junto a Oregi, del Max 2012 al mejor autor teatral en euskera) siguen la línea de espectáculos anteriores como Euskara Sencilloaren Manifestoa y Euskarazetamol, donde la risa ha estado siempre garantizada.

Con esta última producción pasa lo mismo. Quienes estuvieron en Araia en agosto lo saben bien. En aquella ocasión, aunque la representación se hizo en lunes y era la única cita del día, el numeroso público asistente a la sesión de noche del Polideportivo Arrazpi disfrutó de lo lindo. Ahora toca repetir en una representación que se producirá este jueves a las 20.30 horas en un Principal que todavía tiene entradas disponibles por 14, 12 y 9 euros.

Ya sea con Diego López de Haro o con Asterix, la compañía ofrecerá a los espectadores una concatenación de sketchs en los que irá contando su particular versión sobre el euskera, cómo ha ido evolucionando a base de pasar por diferentes conflictos y reyertas. Y es que la obra, escrita por Tellería, se sustenta en una teoría básica: el pueblo vasco va de pelea en pelea, con otros o con él mismo, y es en cada choque cuando el idioma ha ido transformándose. Para representar esa idea es para lo que se contrata a dos actores, llamados igual que los componentes de Ez Dok Hiru. Y a partir de ahí... "Bueno, nosotros podemos tener muy claro que esta reflexión sobre la evolución del idioma es toda una locura, pero ellos se lo toman muy en serio", apunta un Martínez que asegura que "intentamos hace un humor, con perdón, inteligente, incluso diría que pedagógico porque, para empezar, primero nos reímos de nosotros mismos y eso es muy sano".

Un idioma, un mundo Maltratado como pocos, sobre todo gracias a una clase política que se califica por sí misma, es el euskera el que en realidad se sube al escenario para dar vida a una versión bastante distorsionada de su propia historia, una mirada desde el absurdo y lo imposible, aunque ya se sabe que en estos casos, quien sepa buscar encontrará espacios para pensar un momento sobre cuestiones que no dan tanta risa.

Y es que ya se sabe que hay ocasiones en las que la carcajada esconde cargas de profundidad, algo que el propio Martínez deja caer cuando a la hora de hablar de esta propuesta de Ez Dok Hiru salen a la palestra nombres como los de los Monty Python.

"Hacemos algo muy exagerado, un argumento loco, desde el Big Bang hasta el batua, algo que, la verdad, tenemos que decir que está gustando mucho entre la gente puesto que en todos los sitios la respuesta está siendo más que interesante", describe Martínez, quien asegura que la respuesta de los espectadores a determinados gags no está tan influenciada por su procedencia geográfica (y por tanto, por el euskera que hablan) sino "por otras circunstancias como la edad de la gente o si, por ejemplo, son de los que están estudiando ahora o justo acaban de terminar".

Bajo estas premisas se esconde una propuesta pensada para y por el humor, "y escrita por un Patxo que, y no tengo ningún problema en decirlo de manera pública, es uno de los mejores guionistas de Euskadi y parte del extranjero". Lo cierto es que, piropos a un lado, el montaje espera repetir visitas anteriores de la compañía a la capital alavesa y no dejar ni una carcajada sin poder salir.

Eso pasará este jueves dentro de la programación realizada por la Red Municipal de Teatros para la campaña de invierno-primavera, en una cita que, además, cuenta con la colaboración de este periódico.