SITGES. El director inglés Ben Wheatley, después de obtener en la pasada edición del Festival de Sitges el Méliès d'Argent por Kill List, fue recibido ayer con aplausos por su muy negra y muy británica Sightseers, una película de humor macabro, con los actores Alice Lowe y Steve Oram de protagonistas. Un viaje en caravana por la Inglaterra profunda a cargo de Tina, una mujer que vive bajo el yugo de una madre enferma, y su novio Chris, un joven intolerante que no puede soportar determinados ruidos o algunos comentarios de sus vecinos de cámping, es el punto de partida de esta cinta, con momentos hilarantes y otros de violencia gore.
Wheatley, acompañado por Lowe y Oram, señaló que cuando se incorporó al proyecto ya estaba muy avanzado, pero acabó llevando a cabo importantes cambios y dando su toque a los personajes, que no dudan en dejar cadáveres a su paso. Sin embargo, ha advertido que, si hay algún momento de extrema violencia, es porque quería "que el público viera las consecuencias terribles de los actos de estos personajes, porque, si no, tenía el peligro de quedar en un chiste".
androides en sitges También conquistó Sitges el debutante Jake Schreier, que presentó un filme de ciencia ficción, Robot & Frank, protagonizado por un androide que, paradójicamente, "refleja la condición humana". A esa paradoja se ha referido el autor del considerado como uno de los mejores filmes que se han visto hasta ahora en el festival. Schreier arma una historia, de la mano del guionista Christopher Ford, ubicada en un futuro próximo y en la que el siempre solvente Frank Langella da vida a Frank, un anciano con pérdidas de memoria. Ante esta problemática, sus hijos Hunter y Madison, que viven alejados de él, deciden darle como compañía a un androide, con el que acabará teniendo una buena amistad, a pesar de sus iniciales reticencias, y con el que también recuperará su antigua "profesión" de ladrón de joyas.