DONOSTIA. "Son todos nombres muy potentes. Es mejor tener cinco que uno flojo", dice Rebordinos en una entrevista con Efe, cuando habla del reconocimiento que el Zinemaldia hará este año a Dustin Hoffman, Oliver Stone, Tommy Lee Jones, John Travolta y Ewan McGregor.

Será uno más que los concedidos en las bodas de oro del festival, que marcaron el récord, aunque el responsable del certamen admite que también podían haber sido menos. "Pero todo lo que hemos intentado nos ha salido", añade.

Y es que querían "un número importante de premios" como "pequeño regalo de aniversario" a un público que es parte del alma del festival y que este año podrá pedir bastantes más autógrafos que en ediciones anteriores.

A la anunciada presencia de Richard Gere, Ben Affleck y Susan Sarandon se sumarán también este año Penélope Cruz, Javier Bardem y Claudia Cardinale, entre otras estrellas de una lista de la que Rebordinos prefiere reservarse alguna sorpresa.

La celebración de este cumpleaños va acompañada de una mayor actividad que no tiene una correspondencia en las cifras económicas, ya que el presupuesto, que rondará los 7,4 millones de euros, ha aumentado únicamente en algo más de 200.000, procedentes en parte de nuevos patrocinadores privados, con lo que se compensa la pérdida de anteriores "sponsor" y la reducción de 225.000 euros de fondos públicos.

También destaca la aportación del departamento vasco de Industria de 270.000 euros, que ha hecho posible el I Foro de Coproducción Europa-América Latina, lo que permitirá aumentar la presencia de la industria "un 10 % mínimo", algo que Rebordinos cree esencial para el futuro del certamen, que en la última década "ha perdido un 23-24 % de capacidad de gasto" por no haberse aplicado las subidas del IPC.

Asegura que no ha hecho ningún "milagro" y que esta edición es el resultado de "rizar el rizo, de tener gente dentro que se cree el festival, que lo vive con la misma pasión que la dirección".

"La gente con lo mismo está haciendo mucho más. Y también tenemos que agradecer a los proveedores, que están aguantando unas políticas de precio increíbles. Lo bueno es que es un festival que tiene buena imagen y la gente lo quiere mucho y lo apoya hasta donde puede. Este año estamos forzando al límite, esperamos no habernos pasado, pero estamos al límite de todas las posibilidades", afirma.

Explica que además está recogiendo "las semillas" plantadas por el anterior director, Mikel Olaciregui, que se traducen en una importante presencia de títulos estadounidenses, como "Argo", de Ben Affleck, y "Fraude", de Nicholas Jarecki, en la Sección Oficial fuera de concurso, y "Savages", de Oliver Stone, y "Hope springs", de David Frankel, en Zabaltegi-Perlas.

De lo sembrado en 2011, en su primer año al frente del Zinemaldia, destaca la cosecha obtenida en el cine español, que tendrá seis películas en la Sección Oficial, cuatro compitiendo por la Concha de Oro.

Dice que, "normalmente", los filmes españoles "siempre" han querido acudir al certamen donostiarra, pero que en los últimos años "ciertos productores muy importantes tenían la percepción de que Donostia no quería tener nada que ver con el cine español más comercial", algo de lo que discrepa.

"Llevamos año y medio reuniéndonos periódicamente con productores españoles y vascos, con sus asociaciones. Creo que les vamos convenciendo de que Donostia es el sitio para que el cine español se presente. Es el Festival más importante de España y aquí se tiene que ver la producción española más importante", destaca.

Rebordinos está "muy contento" además de la Sección Oficial, que no desea que quede "oculta" por los "grandes nombres" que pisarán la alfombra roja y de la que forman parte, entre otros, filmes de Costa-Gavras, Lasse Hallströn, Laurent Cantet, François Ozon y Bahman Ghobadi.

Añade que "quizá sea más popular que en otras ocasiones", con un mayor número de propuestas para "el gran público", aunque defiende esos títulos que, pese a sumar "grandes detractores", representan "las líneas de trabajo del cine mundial más importante", como ocurrió en la 59 edición con el coreano Kim Ki-duk, vencedor este año en Venecia.

"Algo tiene cuando a todos los festivales nos interesa", concluye.