Londres. La expectación era máxima, y es que desde que las fotografías del príncipe de Inglaterra completamente desnudo en una noche de fiesta en Las Vegas dieran la vuelta al mundo y pusieran en jaque a la Casa Real Británica, todos esperaban ver de nuevo al joven príncipe atendiendo sus obligaciones oficiales.
Y la ocasión elegida por Enrique de Inglaterra no podía ser mejor para limpiar su imagen. El lunes acudió a un acto benéfico en el que se reconocía la labor de una fundación que ayuda a niños enfermos. Así, rodeado de niños, el príncipe Enrique se mostró alegre y tierno con los pequeños que no cesaron en arropar al hijo del Príncipe Carlos con frecuentes muestras de cariño.
Eso sí, acudir a un acto en donde los protagonistas son los niños puede convertirse en un arma de doble filo, y es ya se sabe que los pequeños no tienen pelos en la lengua y pueden provocar más de una situación embarazosa y nada protocolaria. Alex Logan, un niño de seis años y enfermo de leucemia, se convirtió en el centro de todas las miradas ya que había asegurado que cuando viera al príncipe le diría: "Harry, me alegro de que vayas vestido". Sin duda, unas divertidas palabras que a buen seguro pondría en un gran aprieto al joven príncipe. Finalmente, al pequeño Alex le pudo la vergüenza y tal hecho no se produjo para alegría de Enrique de Inglaterra.
Además, el hijo de Carlos de Inglaterra y la desaparecida Diana de Gales también fue visto ayer animando al equipo británico en los Juegos Paralímpicos que se están celebrando en Londres durante estos días. Tras la polémica publicación, el pasado agosto de la web TZM en la que se ve al Principe Harry completamente desnudo junto a una mujer en una habitación de hotel de Las Vegas, la Casa Real Británica está tratando de restaurar su imagen pública.