MADRID. Como bien es sabido, el guión que durante Jackson estuvo preparando junto a Guillermo del Toro, Fran Walsh y Philippa Boyens no se basa exclusivamente en el libro de El Hobbit, sino que también incluye más material procedente de la pluma de Tolkien.
Apéndices, novelas inacabadas y toneladas de notas que Jackson usa para completar los espacios en blanco existentes en las dos grandes obras del creador de la Tierra Media: El Señor de los Anillos y El Hobbit.
En la Trilogía del Anillo ya lo hizo, integrando algunos pasajes de los epílogos, pero parece que ahora Jackson quiere ir más allá y podría usar todo ese material para ampliar la historia concebida inicialmente.
COHERENCIA DE PRINCIPIO A FIN
Y es que, como buen fan de la obra de Tolkien, el objetivo de Jackson es alumbrar una historia coherente de principio a fin, con películas que encajen como las piezas de un puzle, de tal modo que si "algún lunático chiflado quisiera verlas todas seguidas exista una coherencia, un criterio uniforme".
Además, el neozelandés apunta que el uso de ese material extra que se encuentra fuera del libro, le ha permitido convertir El Hobbit, vista en su conjunto, en una cinta más "oscura y seria" de lo que deja traslucir la novela. "No quiero hacer un cuento infantil que lleva a 'El Señor de los Anillos', así que estamos buscando el equilibro", explicaba el propio director-
La primera película, El Hobbit: Un viaje inesperado, tiene previsto su estreno en cines el 14 de diciembre. Un año después llegará a las salas la segunda entrega El Hobbit: Partida y regreso.