vitoria. La Orquesta Sinfónica de Euskadi (OSE) viaja esta semana a Alemania para ofrecer, entre el viernes y el lunes, tres conciertos en la prestigiosa sala Tonhalle de Düsseldorf, y otro más en Gütersloh, con un programa que incluye una obertura del compositor bilbaíno Juan Crisóstomo de Arriaga. Se trata de la decimocuarta gira internacional de la orquesta -séptima por tierras alemanas-, que forma parte de un programa de intercambio con la Düsseldorfer Symphoniker, que toca esta semana en tierras vascas.
Antes de salir hacia Alemania, la OSE actuará hoy a modo de prólogo en el Teatro Victoria Eugenia de Donostia, donde interpretará para su público el mismo programa que lleva a los escenarios germanos. Su director titular, Andrés Orozco-Estrada, dirigirá a la formación en estos recitales, de cuyo programa destaca la Obertura de Los esclavos felices, que Arriaga compuso en 1819 con tan solo trece años. El Concierto para violonchelo y orquesta número 1, de Shostakovitch, con el francés Gautier Capuçon como solista invitado; y la Quinta Sinfonía, de Tchaikovsky, completan el repertorio.
La sinfónica actuará viernes, domingo y lunes en la sede de la Symphoniker de Düsseldorf, la Tonhalle, un antiguo planetario situado a orillas del Rhin que con su cielo estrellado y su larga tradición musical constituye actualmente uno de los escenarios más importantes del país germano. La gira incluye un recital más, el sábado, en la Stadthalle del complejo cultural del teatro de Güterlosh, al noreste de Düsseldorf.
Mientras, la sinfónica de esta última ciudad, una de las orquestas más reputadas de Europa -dirigida por figuras como Mendelssohn-, está actuando esta semana, desde ayer, en los escenarios habituales de la OSE, liderada por Andrey Boreyko, que es a su vez el director principal invitado de la orquesta de Euskadi. Su visita a Gasteiz tendrá lugar el jueves a las 20.00 horas, con el Teatro Principal como escena. En estos recitales, los germanos interpretarán el Concierto para piano y orquesta número 2, de Brahms; y la Sinfonía número 2, de Schumann, con la pianista georgiana Khatia Buniatishvili como invitada.
Iñigo Alberdi, director general de la OSE, destaca el "esfuerzo" que hace la orquesta vasca para mantener su presencia en el extranjero "en unos momentos de crisis económica y de parálisis del mundo de la cultura". Con este tipo de intercambios, se optimizan recursos y se evita además que las orquestas tengan que alterar calendarios. Michael Becker, intendente de la sinfónica alemana, subraya por su parte el interés que ha despertado en su formación el viaje a Euskadi por la peculiaridad de su "pequeña y única" tradición cultural.