vitoria. La primera vez que compartieron creación fue en un insólito concurso de tierras británicas. Su espantapájara no pudo con la de un autor local, que espantaba igual pero gozaba de más favores entre el jurado. Ahora de lo que se trata es de atraer al público, y para ello Josune Rodríguez García y Natalia López de Munain -o, lo que es lo mismo, el tándem Norabaty- cruzan discursos en Espacio Zuloa con una muestra que permanecerá hasta el 30 de junio.
Para ello, que mejor que crear un hogar. El hogar de este "matrimonio creativo" que recibe en las escaleras con flores y tienen a la ilustración, al dibujo, como llave maestra. Antes de alcanzar el último escalón, el aroma de cedro conquista al espectador y después sólo queda dejarse llevar.
"El lápiz es un medio que todo el mundo tiene y con el que puedes hacer lo que quieres", asegura Natalia, que ya ha probado destinos expositivos en el campus universitario y en el café Dublín. Lo suyo son dibujos cuidados e insólitos, donde el ser humano se torna zoomorfo en composiciones que palpitan una magia latente. Encontró su inspiración en el rastro, en una recopilación del diario Crónica -preguerra civil- en el que se escondían misteriosas historias.
La de Josune le llega en su día a día. Tras vivir durante varios años en Londres, absorbiendo el terremoto cultural del downtown, ahora trabaja como auxiliar de atención al público en Artium. Rodeada de la más variada creación contemporánea, se animó finalmente a dar rienda suelta a una pasión que venía de lejos, gestando un trabajo que arraiga en la palabra "crear" y que considera "femenino, espiritual y sereno", con la técnica de encaje de la frivolité como sello de sugerencia.
Ambas reúnen varios trabajos individuales y comparten a la par sus trazos en El reino de los cadáveres exquisitos, que más allá de los pétalos sigue vinculado a la naturaleza con un árbol genealógico en el que entrecruzan ramas estilísticas. Oníricas y surrealistas, las figuras se suceden a lo largo de Espacio Zuloa en un recorrido al que Yo la tengo y Vincent Gallo ponen banda sonora. Autodidactas, abren la participación al público en un trayecto vinculado al pop-up y trufado de frases, como esa del ahora tan visitado Hessel, que proclama que "crear es resistir y resistir es crear". El reino abre sus puertas.