madrid. Inconformista y provocador, Miguel de Unamuno quería "poner alma y no solo pensamiento" en muchos de sus cuentos. Ahora, una edición reúne todos los que se conocen de este gran escritor e intelectual que procuraba convertir en literatura "las más íntimas tormentas del espíritu".
Unamuno (Bilbao, 1864-Salamanca, 1936) sentía una gran atracción por el cuento y le gustaba su espontaneidad, su brevedad: "El escritor que hoy quiere ser leído ha de saber fabricar píldoras, extractos, quinta esencias. La cuestión estriba en hacerlo de modo que sean agradables de tomar; en saber dorarlas", afirmaba en un artículo. Menos conocidos que sus novelas, los cuentos son claves para comprender el pensamiento de Unamuno y su concepción de la literatura, entre otras razones "porque en ellos hay un diálogo con el resto de su obra", señala Óscar Carrascosa Tinoco, responsable de la edición de los Cuentos completos que publica Páginas de Espuma. Tras ocho años de trabajo, Carrascosa ha reunido 87 cuentos en esta edición, lo que la convierte en la más completa de las publicadas hasta ahora. Entre ellos hay algunos inéditos, que no habían sido recogidos "jamás" en libro, como ¡El amor es inmortal!, que apareció en 1901 en una revista venezolana, o De beso a beso.