Hace poco más de un mes que El juego del calamar dijo adiós en Netflix con su tercera y última temporada. Sin tener en cuenta los futuros spin-offs que puedan llegar tras su final, las plataformas de streaming parecen empeñadas en encontrar una sustituta a la exitosa serie coreana. Y precisamente desde Corea del Sur aterriza este martes en Movistar Plus+ una ficción que aspira a convertirse en una digna sucesora: El juego de la pirámide.
La historia tiene lugar en la elitista escuela femenina Baekyeon, en Seúl. Allí, las estudiantes participan en un perturbador sistema de votaciones secretas que las clasifica en niveles de la A a la D. Las alumnas que no logren ningún voto son relegadas a la categoría F, convirtiéndose en víctimas de un atroz acoso escolar por parte de sus compañeras. La protagonista, Seong Su‑ji, es una estudiante recién llegada que es catalogada como una F en su primera votación. Es entonces cuando debe decidir si acepta su estatus y sus violentas consecuencias o si lidera una rebelión contra El Juego de la Pirámide.
A lo largo de diez episodios de 50 minutos de duración, la serie sumerge a los espectadores en un trepidante thriller psicológico en el que las traiciones están a la orden del día.
El juego de la pirámide es la adaptación de un webtoon de culto del mismo nombre. La serie supone además el debut como actriz de la cantante Kim Jiyeon, más conocida como Bona, miembro del grupo femenino de k-pop WJSN. Junto a ella completan el reparto de Jang Da-ah, Kang Na-eon, Emily Sun, Jo Yuan, Cho Dong-in y Shin Seul-ki, entre otros.
Un éxito global
Estrenada en TVING entre el 29 de febrero y el 21 de marzo de 2024, la serie logró un impacto inmediato, convirtiéndose en el contenido más visto de la plataforma surcoreana. Su éxito trascendió fronteras cuando apenas tres meses después pasó a retransmitirse en todo el mundo a través de Paramount+. De hecho, se convirtió en la única ficción surcoreana seleccionada en el festival Series Mania de Francia el pasado año.
El juego de la pirámide ha sido comparada en numerosas ocasiones con El juego del calamar por su enfoque en la supervivencia y las dinámicas de poder dentro de un sistema estructurado que legitima la violencia.
Y al igual que ocurrió con la historia del jugador 456, esta serie ha hecho saltar las alarmas entre los padres y los profesores por el impacto que pueda tener entre los más jóvenes. De hecho en Corea del Sur, principalmente en la ciudad de Jeonju, fueron muchos los colegios e institutos que tuvieron que enviar cartas a los estudiantes y a sus progenitores para alertar sobre casos de acoso escolar inspirados en El juego de la pirámide.