La Navidad es sinónimo de símbolos y costumbres como los villancicos, árboles iluminados, belenes, etc., que unen a personas de todas las edades. Eso no impide que en diferentes pueblos del mundo tengan hueco para sus propios iconos. Y dentro de la cultura y tradición vasca tenemos a Olentzero, figura central de estos días. 

A pesar de que es muy conocido, pocos conocen su origen. Es por eso que la revista ‘National Geographic’, de cara a estas fechas, ha publicado un artículo en su página web en el que ahonda en los secretos de este personaje. 

Un origen no exento de debate

Aunque Olentzero no tiene un origen muy claro, ciertas investigaciones apuntan a que su aparición tendría lugar en Lesaka (Navarra), desde donde su leyenda se empezó a extender. Aun así, lo que resulta verdaderamente curioso es el significado de su nombre.

Según teorías como la que apuntaba el historiador Lope Martínez de Isasti, Olentzero vendría de ‘onenzaro’, una referencia temporal relacionada con la Nochebuena. Esto quiere decir que, más que una figura, sería una fecha destacada del calendario. 

Asimismo, otros investigadores como Julio Caro Baroja, el nombre de este personaje podría tener paralelismos con palabras relacionadas con algunos cantos navideños franceses, de los que surgirían muchas variantes del nombre y adaptadas a los dialectos locales. 

Olentzero preparado para saludar a los niños.

Olentzero preparado para saludar a los niños. Deia

El carbonero que llega desde la montaña

De acuerdo con la tradición, en la noche del 24 de diciembre, miles de niños y niñas de todo Euskal Herria esperan la llegada de Olentzero, representado como un carbonero que baja de la montaña montado en su burro. 

Su objetivo es repartir regalos entre los más pequeños que a lo largo de todo el año se han portado bien. Con la cara manchada de carbón, pañuelo al cuello y alpargatas, el mito también afirma que es amante del vino, de la comida y que posee una inteligencia única. 

Del rito pagano al mensajero cristiano

Dejando a un lado la tradición, hay quienes especulan que Olentzero guarda su relación con antiguos rituales paganos del solsticio de invierno. Es más, con la llegada del cristianismo, se pensó que podría llegar a ser el mensajero del nacimiento de Jesús.

Por otro lado, en el siglo XVIII, Olentzero era caricaturizado como alguien intimidante que asustaba a los niños desobedientes. Dichas leyendas aseguran que descendería por la chimenea con una hoz, mientras que otras lo describen con cientos de ojos y oídos para vigilar a los menores. 

Sin embargo, con el paso del tiempo, esta creencia dio paso a una imagen mucho más agradable. Un buen ejemplo es la aparición de Mari Domingi en el siglo XX, su compañera, que le acompañaba en sus tareas, pero sin perder jamás su esencia. 

Olentzero y Mari Domingi Redacción DNA

Olentzero en Vitoria

Olentzero y Mari Domingi se acercarán a Vitoria el próximo miércoles 24, un día en la que tendrán una agenda apretada que arrancará con la recepción a los niños en el Ayuntamiento, de 10.00 a 15.00 horas, acompañados de los galtzagorris y la música de las trikitixas, albokas y txalaparta de la Academia Municipal de Folklore.

Por la tarde, a las 18.00 horas, empezará el desfile de Olentzero y Mari Domingi desde el Centro Cívico Iparralde, y pasará por la calle Portal de Legutiano, calle Francia, calle La Paz, calle Olaguibel, Mateo Moraza y terminando en la Plaza de la Virgen Blanca.

La comitiva contará con cuatro carrozas: la primera, un bosque mágico, seguido de la de Mari Domingi, la de Olentzero y una última desde la que se lanzarán caramelos, tal y como ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.