Una comunidad de vecinos de Vitoria, en pie de guerra por un perro y una flauta

Las reuniones de portal suelen ser en general tensas por la dificultad de llegar a un acuerdo en temas tan delicados y que conllevan un importante desembolso económico como la reforma del portal, la instalación del ascensor o el uso de la calefacción central.

Sin embargo, hay otros problemas de convivencia que provocan tensiones y confrontaciones en el día a día como pueden ser vecinos ruidosos, humedades, el nivel de la música, olores, vecinos morosos o una reforma en un piso.

Precisamente, en Vitoria hay una comunidad de vecinos que está enfrentada desde hace unos meses por el uso que hace una familia de un patio interior "justo a la hora de la siesta", tal y como explican a DNA algunos afectados.

Los propietarios del primer piso de varios portales del barrio de Coronación disponen de una amplia terraza que da a un patio interior.

Tal y como relatan algunos vecinos, "hay una familia que lleva meses sacando al perro a la terraza justo después de comer, sobre las 14.30 y las 15.00 horas. Y ahí dejan al animal, solo durante un largo tiempo. Y así claro, el perro no deja de ladrar, se le oye en todo el vecindario".

Este problema, dejar a la mascota sola en casa y ladrando durante horas, afecta a muchas comunidades de vecinos en Gasteiz, lo que genera serios conflictos entre los propietarios de un mismo inmueble.

Pero en esta comunidad de vecinos del barrio de Coronación hay "otro nuevo ruido que también ha empezado a molestar". Y es que la misma familia está haciendo uso de la terraza interior para otro fin: algunos días ensayan con la flauta a la misma 'hora conflictiva', la hora de la siesta, algo que desespera y enfada a más de un vecino.

Hay comunidades de propietarios que pactan en las juntas de vecinos que se respeten los horarios destinados al descanso, incluyendo en ellos los horarios de la siesta. Sin embargo, este acuerdo es voluntario y no está regido por ninguna normativa.