“Tener alguna pérdida menos y mover al Barça”, señalaba Pablo Laso antes del inicio de la segunda mitad en los micrófonos de Movistar a la hora de dar las claves que necesitaba su equipo para poder dar la puntilla a un Barça al que iba ganando de tres puntos en la primera mitad. El técnico gasteiztarra pedía más ritmo a su equipo, ser más rápido y eso Forrest se lo dio.
El base estadounidense firmó un partido soberbio. El director de juego azulgrana estuvo espectacular. Dirección, puntos, rebotes, asistencias, faltas recibidas gracias a su verticalidad y una acertada toma de decisiones en momentos cruciales permitieron al jugador procedente de los Atlanta Hawks firmar su mejor partido como baskonista.
Hasta ahora, el de Alabama promediaba en la ACB 10 puntos, 4 rebotes, 4,5 asistencias y 2 pérdidas para una valoración de 11,5 créditos.
En el Palau disparó sus registros mucho más. Forrest casi dobló su caudal anotador en la competición doméstica al acabar con un 19 puntos, con un excelente porcentaje del 70% en tiros de 2 del (7/10) cuando hasta ahora promediaba un 50%.
De menos a más
Ante un súper equipo como el Barça capturó 6 rebotes, dos más de los que promediaba hasta la fecha y repartió 4 asistencias, casi las mismas que llevaba de media en los dos partidos anteriores de liga (4,5), mientras que aportó 2 robos, aspecto estadístico en el que su casillero estaba a cero y su valoración se disparó hasta los 27 puntos cuando antes del duelo en el Palau promediaba tan solo 11,5.
Lo dicho, Forrest completó un partido para enmarcar. Un duelo en el que fue de menos a más. En el primer cuarto casi ni participó al estar tan solo 53 segundos en pista, lo que da más valor aún si cabe a sus excelentes registros ante el Barcelona. Y es que Forrest hizo esos registros descomunales en tan solo 23:07 minutos. De matrícula de honor.
En el segundo cuarto ya dio los primeros chispazos durante los 6:46 minutos que estuvo en cancha en los que anotó 4 puntos con 2/3 en tiros de 2, tres rebotes, una asistencia y un robo para seis créditos de valoración.
Esos eran sus números al descanso. Notables para poco más de siete minutos. Pues bien, Forrest comenzó su exhibición en la segunda parte. Penetraciones a canasta, tiros de media distancia, manejo del tempo del partido y con personalidad para jugársela cuando la bola más quemaba.
Su defensa a Punter
Un killer que además jugó un papel fundamental en defensa. Buena prueba de ello es la jugada en la que impide a Punter lanzar un triple, que de haberlo convertido hubiera permitido al Barça adelantarse a falta de unos segundos para el final del duelo.
Soberbio en ambos lados de la cancha y autor de una segunda parte antológica, sobre todo un último cuarto en el que fue dueño y señor del partido. Los números así lo confirman.
En el periodo definitivo, Forrest, que jugó los 10 minutos, anotó 11 puntos con 4/4 en tiros de dos, 0/1 en triples, 3/4 en tiros libres, un rebote, una asistencia y tres faltas recibidas para 14 de valoración, algo más de la mitad de los 27 que alcanzó en un encuentro donde se reivindicó a lo grande.