El aterrizaje de los Emiratos Árabes Unidos en el baloncesto europeo de máximo nivel ya es una realidad y el Oriente Próximo apunta a tener cada vez mayor influencia en la Euroliga con sus millonarias inversiones, algo que, por otro lado, lleva tiempo sucediendo en otros tantos deportes como el fútbol, el ciclismo o la Fórmula 1.

El primer paso para ello ya se ha dado con la creación de un club de Dubai, que competirá la próxima temporada en la Liga Adriática y que planea unirse también a la Eurocup como paso previo a su aterrizaje definitivo en la Euroliga una vez el conjunto árabe haya consolidado su estructura deportiva. Pues bien, todo apunta a que no será necesario esperar a ese momento para que los mejores equipos de Europa deban sobrevolar el Golfo Pérsico para disputar encuentros oficiales.

Según informa el periodista Marc Mundet en Jijantes, Abu Dabi es en estos momentos la principal candidata a albergar la Final Four de la temporada 2024-25. La capital de los Emiratos Árabes Unidos ha tomado la delantera respecto a otras ciudades que habían presentado su candidatura y, de hecho, el contrato para sellar el acuerdo ya está redactándose, de acuerdo a esta misma información.

La fase final del torneo, el evento anual más mediático del baloncesto europeo que reúne a los cuatro mejores equipos del continente en busca del ansiado título de campeón, se disputaría en el Etihad Arena, un moderno pabellón con capacidad para 18.000 espectadores y perfectamente preparado para albergar este tipo de eventos.

Ese no será el problema, sino encontrar la fórmula para llenar sus gradas teniendo en cuenta la gran distancia que deberán recorrer las aficiones de los participantes. Los precedentes en eventos de otras disciplinas que han contado con una acogida muy pobre en cuanto a asistentes pese a la magnitud de la cita tampoco invitan al optimismo.

Importante impulso económico

El motivo de que Abu Dabi haya tomado la delantera frente a otras propuestas que estaban sobre la mesa como el Palau Sant Jordi de Barcelona o el Stark Arena de Belgrado, que encajan mejor con la tradicional filosofía de la Euroliga, no es otro que el mareante montante económico que ofrece Abu Dabi.

Concretamente, el máximo torneo del baloncesto europeo percibirá 75 millones de euros por llevar tres ediciones de la Final Four a Abu Dabi empezando por 2025, que no necesariamente serán consecutivas. Son cifras, evidentemente, que resultan inalcanzables para Belgrado o Barcelona, que ya se ha resignado y empieza a buscar alternativas de explotación del pabellón durante las fechas que había reservado en mayo para la disputa de la final a cuatro.

La opción de Abu Dabi surgió en el pasado mes de febrero y se enfrió por el conflicto bélico de Israel y la incertidumbre del contrato con IMG –empresa encargada de la gestión de los derechos televisivos del torneo–, pero ahora vuelve a ser la favorita para quedarse con la Final Four. De confirmarse, esta será la segunda vez que la fase final de la Euroliga se dispute fuera de Europa (en 2004 se jugó en Tel Aviv).

Habrá que esperar, por lo tanto, para volver a disfrutar de una Final Four en España, algo que ocurrió por última vez en Vitoria-Gasteiz en 2019. Esta campaña, salvo sorpresa, los vitorianos que quieran disfrutar del mayor evento del baloncesto europeo deberán realizar un viaje mucho más largo y costoso, concretamente de 5.600 kilómetros.