Ya se conocen los 18 equipos que competirán entre sí durante la próxima edición de la Euroliga. Según ha confirmado el propio organismo, el club elegido para ocupar la plaza del Gran Canaria, quien rechazó su participación por motivos económicos, ha sido el Valencia Basket, el principal candidato junto al Türk Telekom.
Por lo tanto, repiten los dieciocho equipos de la pasada temporada, entre ellos el Baskonia, ya que los adinerados conjuntos rusos como el CSKA y el Zenit San Petersburgo siguen quedando fuera de la ecuación desde la invasión de Ucrania.
La novedad significativa de la nueva Euroliga, como se conoció el pasado martes, es la inclusión de un 'Play-In' que permitirá luchar desde el séptimo al décimo clasificado de la fase fegular por las dos últimas plazas para los 'play offs'.
Con el nuevo formato, los equipos clasificados en séptimo y octavo lugar se enfrentarán en un partido único -en casa del séptimo- para conseguir una plaza para las series de cuartos de final, en el que jugarán contra el segundo clasificado de la fase regular.
Por su parte, los equipos que ocupen el noveno y décimo puesto se medirán también a partido único, cuyo perdedor quedará eliminado y el ganador viajará tres días más tarde para enfrentarse al perdedor del duelo entre el séptimo y octavo clasificado. El ganador de este último choque se medirá al líder de la fase regular en la antesala de la Final a Cuatro.
En esencia, los equipos clasificados en séptimo y octavo lugar, que habrían estado en los 'play offs' con el formato anterior, tienen una ventaja significativa en la eliminatoria, ya que cada uno necesita ganar solo un partido para llegar a los cuartos de final. Los equipos clasificados en noveno y décimo lugar deben ganar dos partidos para no quedar eliminados.
Por si calendario no era ya lo suficientemente cargado y resultaba complicado encajar las 34 jornadas, este nuevo formato supondrá una nueva vuelta de tuerca para poner a prueba el físico de los jugadores.