Tras la apoteósica victoria ante el Valencia Basket que sirve para devolver el optimismo a todo el mundo, el Baskonia afronta este domingo (20.00 horas) un compromiso mucho menos glamuroso en la ACB. No en vano, aterriza en el Buesa Arena un recién ascendido como el Covirán Granada en un partido que, a priori, parece propicio para dosificar esfuerzos teniendo en cuenta el infernal calendario a la vuelta de la esquina.
El equipo vitoriano, el único capaz de seguir el ritmo a nivel doméstico a los dos grandes, recibe a los nazaríes en víspera de dos jornadas exigentes a más no poder en la Euroliga que pueden allanar el camino hacia el 'Top 8' en caso de triunfo.
Esperan este martes el Real Madrid en el WiZink Center y el AS Mónaco de Mike James el viernes en el Buesa Arena, por lo que Joan Peñarroya se encuentra obligado a seguir repartiendo los minutos entre todos los componentes de la plantilla para conservar la frescura.
De lo que no hay duda ya es que este Baskonia con dos caras muy diferenciadas en función de si posee o no el factor cancha es prácticamente inabordable al calor de los suyos. Esta vez emerge otro duelo propicio para sumar una plácida victoria porque, respetando mucho al Granada, la diferencia de potencial entre ambas plantillas es enorme.
El cuadro andaluz, que entre sus filas acoge al veterano exbaskonista Alex Renfroe y semanas atrás también consiguió la cesión del barcelonista Michael Caicedo, se halla en plena cuesta abajo desde que perdiese a su solvente boya interior (Cristiano Felicio) a finales de diciembre debido a la fractura de tibia.
Prueba de su alarmante pérdida de pujanza es que tan solo ha ganado uno de sus doce últimos encuentros, en concreto ante el Fuenlabrada en su casa. Pese a esta fatídica racha de resultados, los hombres dirigidos por Pablo Pin mantienen una cómoda renta de tres triunfos sobre la zona roja de la clasificación, en la que se hallan inmersos el Manresa y el Fuenlabrada.
La incógnita del descarte
Joan Peñarroya dispone de una ocasión pintiparada para dar algún descanso y regular esfuerzos, una política que ha puesto en práctica en muchas ocasiones durante esta temporada. Es en jornadas como hoy cuando jugadores de la segunda unidad como Arturs Kurucs, Sander Raieste o Dani Díez necesitan alimentar su autoestima.
Con independencia de la baja de Sedekerskis, el técnico catalán deberá efectuar un descarte antes del choque. El jugador dado actualmente de baja en la ACB es Daulton Hommes, pero todo hace indicar que su ficha volverá a ser activada ante el Granada.
Su pletórica actuación ante el Valencia Basket, donde se fue hasta los 31 créditos de valoración y logró el récord histórico de tiros libres anotados por parte de un jugador baskonista en la Euroliga con 15 de 15, merece otra vez el voto de confianza para que sea el cuatro titular del equipo.
La gran actuación de Hommes ante el Valencia, donde se fue hasta los 31 créditos de valoración y logró el récord histórico de tiros libres anotados por parte de un baskonista en la Euroliga, puede servir para que su ficha sea activada otra vez en la ACB
Frente a los taronjas quien no jugó ningún segundo fue un Steven Enoch cuyo crédito está menguando hasta límites insospechados. El pívot armenio vive sus horas más bajas desde que vista la elástica azulgrana. Nadie se sorprendería si fuera el sacrificado ante el Granada, aunque otra posibilidad es que Peñarroya le devuelva este domingo al primer plano para intentar que recupere parte de la confianza extraviada.
Otro jugador que necesita reencontrarse con su mejor versión es Markus Howard. El killer de Nueva Jersey encadena tres partidos en los que se le ve frustrado e impotente sobre la cancha. No le sale nada en ataque, los rivales le buscan las cosquillas en defensa aprovechando sus evidentes flaquezas y las continuas faltas le están sacando de ritmo. Sin embargo, es el clásico jugador que en cualquier momento puede resucitar y el Granada se perfila como un rival ideal para hacer realidad dicho objetivo.