Ilusionado ante su debut en Euroliga. Tras estrenarse en la ACB, Darius Thompson vivirá este jueves su bautismo en la competición continental. Ese era su deseo cuando firmó por el Baskonia este pasado verano. Ahora lo verá cumplido y está más que emocionado por ello. "Vale la pena jugar en el nivel más alto de Europa. Es emocionante llegar a este nivel. Muy emocionado por el partido del jueves", ha asegurado el director de juego azulgrana.

El base estadounidense con pasaporte italiano desconoce que se va a encontrar en la Euroliga. Ha ido dando pasos como desvela "desde abajo" tras empezar su periplo en competiciones continentales en la Champions League de la FIBA y después la Eurocup y ahora llega a lo más alto tras aterrizar en la Euroliga. "Cada año doy un paso adelante, así que estoy listo para salir y competir en el mejor torneo de Europa".

A su juicio, el equipo también lo está. Darius Thompson es consciente de que no será sencillo. "Es la competición más dura", ha recordado. Por ello, asume que todos en el Baskonia, hasta los "debutantes", tienen que estar preparados para dar lo mejor de sí. "Hay que estar mucho más físico, ser más rápido, jugar más en transición y tratar de encontrar canastas fáciles". Ese es el reto para el Baskonia en esta Euroliga que está a la vuelta de la esquina. Igualar la intensidad física de auténticos equipazos con jugadores muy, muy fuertes.

"Nuestra unión es realmente buena. Ganemos o perdamos, hemos estado ahí el uno para ayudar el otro, en lo positivo y en lo negativo"

El base de Tennessee ve al equipo preparado para ello. Aunque advierte de que hay mucha juventud en la plantilla, eso no debería ser una rémora para poder competir en esta Euroliga. Thompson considera que existe la química necesaria para que este Baskonia funcione. "Somos jóvenes, pero juntos formamos un buen equipo. Creo que nuestra unión es realmente buena. Ganemos o perdamos, hemos estado ahí el uno para ayudar el otro, en lo positivo y en lo negativo. Siempre estamos ahí para ayudarnos mutuamente", ha comentado esta mañana.

Esa cohesión y el espíritu guerrero que ve en el vestuario le hace ser optimista de cara al futuro. "Seguiremos luchando y mejorando. Somos jóvenes y aún estamos en un proceso de aprendizaje, pero creo que estaremos bien". Confianza. Eso sí, esa bisoñez de la plantilla le va a jugar en ocasiones malas pasadas tal y como se vio el pasado domingo en el Palau ante el Barcelona.

El equipo sufrió un apagón. Se desconectó cuando el Barcelona subió la intensidad y se le cruzaron los cables al ver que no eran tratados por los colegiados por el mismo rasero. Thompson reclama calma para saber salir de esas situaciones. "A veces cuando juegas fuera no recibes los mismos arbitrajes que en casa. Nosotros tenemos que estar preparados para esos momentos y debemos hablar entre nosotros y calmarnos unos a otros". Nada de descentrarse. Cabeza fría y olvidarse de los árbitros ya que tal y como explica Thompson "a veces van a seguir nuestro camino y otras no". No se puede estar pendiente de ellos.

"A veces cuando juegas fuera no recibes los mismos arbitrajes que en casa. Debemos hablar entre nosotros y calmarnos unos a otros"

El director de juego azulgrana hace autocrítica y cree que el Baskonia también tuvo su parte de culpa en lo sucedido durante la segunda mitad el Palau. "Comenzamos muy fuertes en la primera mitad y luego en la segunda no". Además, Thompson cree que su equipo tampoco defendió cómo debía y permitió al Barça "lanzar muchos tiros libres", a la vez que fueron incapaces de cortar su racha cuando empezaron a remontar. "Tenemos que hacerlo mejor para no dejar que los equipos sigan con una racha". En eso están. En seguir mejorando. Es lo que le toca a un equipo joven como el Baskonia.

Equipo, esa es la palabra que le gusta a Thompson. El italoestadounidense prima lo colectivo sobre lo individual. Por eso no piensa en sus actuaciones personales a la hora de hacer un balance de lo sucedido hasta ahora. "Hemos ganado un partido y perdido otro. Eso es lo que importa. El aspecto personal no me preocupa nada. Es más importante el equipo para mí". Por eso, explica que su objetivo al saltar a la cancha es "hacer todo lo que el equipo necesite" para ganar. Es lo que busca. "Ganar". Un tipo competitivo. Como su técnico.

Un entrenador que les pide intensidad y velocidad. Sobre todo esto último. "Nos pide que juguemos rápido. Más rápido. Más rápido. Así que simplemente hay que salir a la cancha, tratar de jugar rápido en transición, empujar y tratar de mantener un ritmo alto". Un Baskonia veloz. Esas son las señas de identidad del cuadro azulgrana esta temporada. Y con carácter como ha desvelado también el jugador norteamericano. En el vestuario tienen órdenes de "tratar de ser más agresivo con la pelota y mostrar nuestro carácter en cada partido". Un Baskonia peleón y competitivo como añade Thompson. Y es que Peñarroya les pide que muestren "lo duros que somos" y que peleen cada partido con mucha "valentía".