Cuando Marcelinho Huertas dejó el Baskonia al terminar la temporada 2019 pocos pensaron que la gasolina (en su caso el diésel) le iba a durar todavía al menos tres temporadas más. Parece que el tiempo pasa para todos los jugadores menos para el base de Sao Paulo, que a dos semanas de cumplir 39 años dio el pasado domingo una lección de baloncesto en Bilbao para llevar al Lenovo Tenerife a alzar su segundo título de campeón de la Basketball Champions League.
No en vano, el exazulgrana fue nombrado MVP de la final al haber sumado 13 puntos con un 60% de acierto en tiros de campo y 14 asistencias para una valoración de 22 créditos. Una actuación solo al alcance del mejor Marcelinho. O, mejor dicho, del Marcelinho de siempre. Su aportación fue fundamental para romper el encuentro en un tercer cuarto en el que el paulista brilló con luz propia. El Baxi Manresa mandaba en el encuentro al descanso por un apretado 50-49, pero en el tercer cuarto Huertas lideró un parcial de 17-33 para dejar el encuentro encarrilado, con participación directa en 18 de esos 33 puntos mediante canastas o asistencias.
El base brasileño, a pesar de que ahora debe medir más sus esfuerzos que antaño, conserva esa agilidad que siempre le ha acompañado a lo largo de su carrera y sigue sacando petróleo de cada jugada de pick & roll, siempre bien acompañado por su inseparable pareja de baile Giorgi Shermadini. Con él forma una de las sociedades más fructíferas de la ACB y también de la BCL, donde ha sido el segundo máximo asistente del torneo.
La velocidad que ha podido perder en las piernas con el paso de los años la compensa con su experiencia y la rapidez con la que piensa y toma decisiones. Sabes lo que va a hacer, pero para cuando lo quieres evitar, ya lo ha hecho. Lo que no cambia y no cambiará nunca es esa característica bomba a una pierna cuando se dirige en carrera hacia canasta. Marca de la casa.
Se suele decir que la edad es solo un número y en Tenerife lo tienen claro. Han seguido confiando en Huertas y, como ya ha dicho en alguna ocasión el director deportivo Aniano Cabrera, “si Marcelinho quiere seguir, seguirá”. Ya se habla de su renovación por una temporada más y otra opcional, por lo que podría seguir vistiendo la camiseta del conjunto canario a los 41 años.
Si hasta ahora la fórmula ha funcionado, ¿por qué cambiarla? Huertas no ha bajado el nivel desde su llegada a las islas y sus números en la ACB esta temporada, con 12,8 puntos y 6,3 asistencias de media, son prácticamente calcados a los del curso 2019-20, cuando promedió 12,2 puntos y 8 asistencias. De hecho, está pasando por uno de los momentos más dulces de su carrera y que en marzo registrara sus máximos históricos en anotación (33 puntos) y valoración (38) en el partido contra el Obradoiro es buena muestra de ello.
Si el domingo le tocó al Baxi Manresa sufrir el talento de Marcelinho, mañana a las 21.30 horas será el turno del Baskonia, que necesita una victoria por siete puntos o más en cancha del Tenerife para superar a los de Txus Vidorreta en la clasificación y situarse en quinta posición, aumentando así las opciones de evitar a los dos clubes de fútbol en la primera ronda del play off. No será nada fácil, ya que el director de juego brasileño no acostumbra a soltar el pie del acelerador después de alzar un título, siempre está pensando en el siguiente encuentro.
Con dos etapas diferentes en el Baskonia a sus espaldas (2009-2011 y 2017-2019), Huertas es un jugador muy querido por la afición gasteiztarra, a la que ha mostrado aprecio siempre que ha jugado en el Buesa Arena. Sin embargo, esta vez, como en tantas ocasiones a lo largo de su carrera con el Joventut, el Bilbao Basket, el Barça o el Tenerife, intentará trastocar los planes baskonistas. En el duelo de ida en Vitoria no tuvo su mejor día y solo anotó dos puntos y cuatro asistencias, pero los canarios consiguieron igualmente el triunfo por 65-71. Eso sí, aquel día no contó con la inestimable ayuda de Shermadini, que no pudo disputar dicho encuentro.
Ahora, con ambos sobre el parqué y lejos del Buesa, el encuentro será mucho más exigente para los alaveses, aunque también es cierto que poco tiene que ver la versión actual de los azulgranas con la de la sexta jornada. Por lo tanto, se espera un duelo vibrante por todo lo que hay en juego, ya que ambos conjuntos buscan terminar lo más arriba posible en la clasificación. Una vez más, Huertas se cruzará por el camino del Baskonia. Y las que quedan. l
El base brasileño fue clave en el triunfo del Lenovo Tenerife al participar en ?18 de los 33 puntos de un tercer cuarto memorable