Vitoria. El croata concluyó que la de esta temporada "es una de las Euroligas más duras hasta la fecha porque es muy exigente" y confesó que están "emocionados de empezar la competición ante un equipo histórico que en los últimos años está haciendo las cosas muy bien" y les va a poner las cosas muy difíciles.

Advirtió de que aunque ahora parece que no es importante, todos los partidos son clave, "sobre todo teniendo en cuenta la igualdad que reina en la competición".

Perasovic asumió que hay 12 o 14 equipos que tienen el objetivo de estar en "playoff" y apuntó que los lituanos juegan "muy duro en su campo" y es un equipo "ordenado en ataque". Por eso dijo que "hay que saber jugar contra la dureza, tener el manejo del tiempo y defender bien los 24 segundos".

Opinó que todas las plantillas están verdes todavía porque ha habido unos jugadores que han llegado hace poco del Mundial y otros han estado lesionado.

Incidió en que si el Baskonia no entra en "playoff" se considera un fracaso, pero no es igual para el Zalgiris, un equipo que "siempre consiguen fichar bien y tiene su fuerza en los jugadores lituanos de primer nivel".

Subrayó que hubiese preferido empezar en casa con tres partidos y no al revés, al tiempo que remarcó que nunca había visto que una escuadra empezara un competición con tres seguidos fuera de casa, como le pasa al Baskonia esta temporada.

En cambio, destacó que en esta competición "jugar en casa o fuera no tiene tanta diferencia porque hay equipos muy potentes y depende del día". "Se ha perdido la ventaja de campo que había antes", opinó.

Es partidario de hacer algún movimiento en el mercado para sustituir al lesionado Jayson Granger, pero comentó que esperarán a ver cómo se encuentra el equipo cuando se reincorpore Nik Stauskas.