Vitoria - La Euroliga constituye la incuestionable prioridad durante este mes de abril y todos los esfuerzos irán destinados a tratar de revertir el favoritismo del CSKA en busca de una plaza para la Final a Cuatro prevista en el Buesa Arena, pero la ACB no es una cuestión baladí para un Baskonia convertido en la única alternativa al poder de los dos grandes y cuya trayectoria, en líneas generales, está siendo positiva desde el arranque del curso.

A falta de ocho jornadas para la llegada de las series finales por el título, el conjunto vitoriano tiene la certeza de que, como mínimo, acabará tercero, aunque todavía no renuncia a escalar una posición y desbancar al Real Madrid con el fin de garantizarse la ventaja de campo en una hipotética semifinal que enfrentaría a ambos pesos pesados siempre que superen la primera eliminatoria correspondiente a cuartos.

Este objetivo azulgrana, sin embargo, se halla plagado de dificultades por varios motivos. Para empezar, el Kirolbet tiene una victoria de desventaja en la tabla clasificatoria respecto al Real Madrid que, en realidad, son dos. Porque, en caso de un posible empate con los merengues, siempre quedaría por debajo al haber perdido los dos enfrentamientos directos (74-91 en Vitoria y 82-76 en la capital).

A ello se suma que el plantel de Perasovic debe afrontar aún dos desplazamientos de altísimo riesgo al Palau Blaugrana (Barcelona) y la Fuente de San Luis (Valencia Basket). Por contra, el calendario que les resta a los pupilos adiestrados por Laso es sumamente propicio para incluso poder sumar un pleno de triunfos en las ocho jornadas pendientes. Y es que casi todos los adversarios ligueros en la hoja de ruta que aguarda al técnico vitoriano se encuentran ubicados en la parte baja. Acaso la única cita comprometida será la visita del cuadro taronja al WiZink Center en la penúltima jornada.

Por tanto, podría llegar a asegurarse sin temor a equívocos que el Baskonia se encuentra en tierra de nadie en el frente doméstico habida cuenta del holgado colchón que atesora respecto a la cuarta posición, por la que pugnan Unicaja y Valencia Basket. La posibilidad de mirar hacia arriba se antoja una quimera pese a que el calendario de los alaveses no depara grandes trampas si se excluyen esas visitas a la Ciudad Condal y la capital del Turia.

Cinco de los ocho partidos tendrán lugar en el Buesa Arena, donde la lógica invita a pensar en un pleno ante el Andorra, el Fuenlabrada, el Manresa, el Burgos y el Joventut. Lejos de sus dominios, al Kirolbet también le tocará disputar un derbi muy desigual ante un renacido Gipukoa Basket que todavía no ha dicho su última palabra en la pelea por la supervivencia liguera.

De lo que también existen pocas dudas es que el Barcelona cerrará la fase regular en la cúspide y dispondrá así de la ventaja de campo en todas las eliminatorias por el título. Ahora mismo, aventaja en dos triunfos al Real Madrid, más el average, y en tres al Baskonia, a quien también doblegó en el Buesa Arena en el choque de ida (73-82). El combinado de Svetislav Pesic, eso sí, deberá afrontar un calendario repleto de piedras con cinco desplazamientos (Zaragoza, Joventut, Gran Canaria, Andorra y Obradoiro) y tan solo dos partidos como local (GBC y Valencia), al margen del aplazado ante el Baskonia que se celebrará el próximo 3 de mayo para que no interfiera en el desarrollo de las eliminatorias del Top 8 de la Euroliga.

Barcelona (22-4). En casa con Baskonia, Valencia y GBC. Cinco partidos a domicilio (Zaragoza, Joventut, Gran Canaria, Andorra y Obradoiro).

Real Madrid (20-6). Como local ante Obradoiro, Breogán, Estudiantes y Valencia. Lejos del WiZink Center esperan Murcia, Burgos, Zaragoza y GBC.

Baskonia (19-7). Cinco choques en el Buesa (Andorra, Fuenlabrada, Manresa, Burgos y Joventut) por solo tres desplazamientos (Barcelona, Valencia y GBC).