vitoria - El Baskonia dio el pasado domingo un grave paso atrás en sus aspiraciones de pelear por la segunda posición de la fase regular tras caer ante el Unicaja en un duelo directo, pero al menos se encuentra todavía en condiciones de asegurar la ventaja de campo de cara al primer cruce del play off por el título. Los pupilos de Sito Alonso serán cuartos de forma matemática si resuelven mañana favorablemente el peligroso derbi de Miribilla ante el Bilbao Basket, todavía con pequeñas opciones de desbancar al Andorra de la pelea por el octavo lugar, y el Unicaja sucumbe en su salida a la pista del Murcia.
El Baskonia está obligado a sumar un triunfo más que los andaluces para mantener su actual ubicación. Y es que, en caso de igualdad a victorias, siempre quedaría por debajo de su reciente verdugo liguero, que también le sometió en el partido de ida en el Martín Carpena, por lo que el basket average sonríe a los de Joan Plaza.
De lo que no hay duda es que el combinado vitoriano ya no depende de sí mismo para intentar subir algún peldaño tras el fatídico revés del domingo. Tras la derrota del Valencia en Andorra, disponía incluso de la posibilidad de asaltar la segunda posición en manos de los levantinos y gozar así de la ventaja de campo hasta una hipotética final liguera. Pues bien, la derrota ante el Unicaja no solo impidió al Baskonia ponerse a la altura del conjunto dirigido por Pedro Martínez sino también propició la pérdida de un puesto en la clasificación con la victoria del Barcelona sobre el Fuenlabrada.
Taronjas y culés afrontan, en teoría, dos compromisos sencillos en lo que resta de fase regular. Los primeros se medirán al Estudiantes y Murcia, mientras que los segundos se verán las caras con el Iberostar y el Obradoiro. Difícil, por tanto, que el Baskonia pueda superarles en la tabla aun ganando sus dos choques pendientes. Todo hace indicar que, tal y como sucedió en la Euroliga, el cuadro azulgrana competirá por su cuarta ACB de la historia desde el lado más áspero. Si se impone la lógica, su primer rival podría ser un Unicaja cuyo rendimiento describe una clara línea ascendente. En caso de superar este duro escollo, aguardaría casi con total seguridad en semifinales el todopoderoso Real Madrid.