Vitoria - Ilimane Diop constituye por motivos obvios una de las grandes esperanzas del Baskonia para reverdecer viejos laureles, pero todavía no dispone de un cuerpo privilegiado para ser un pívot dominante y dejarse sentir en las zonas. Al espigado interior senegalés le sobra ilusión y desparpajo para enfrentarse a cualquier armario, aunque su primera aventura en la élite del baloncesto ha acreditado la imperiosa necesidad de fortalecer un físico demasiado liviano para la enorme exigencia que implican dos torneos como la ACB y, sobre todo, la Euroliga.

Es por ello que el Baskonia ha decidido tomar cartas en el asunto para que uno de sus diamantes en bruto, de apenas 19 años, pueda conseguir avances significativos en su progresión como baloncestista. Según comunicó ayer el club alavés, Diop no se incorporará hoy a la concentración de la selección española sub'20 en Playa de Aro (Gerona) a las órdenes de Jaume Ponsarnau para la disputa del Europeo de la categoría en Grecia en julio. "Dentro del plan de progresión del jugador", se especificó en la nota a los medios, ambas partes "han consensuado" una medida hasta cierto punto lógica que debe redundar en el crecimiento del joven africano y su consolidación como un pilar del Laboral Kutxa en los próximos años.

Diop, reclutado por la secretaría técnica azulgrana a finales de 2010 cuando militaba en el Adeje de Tenerife, llevará a cabo "un plan específico de fortalecimiento físico". Para ello, contará con la supervisión de los fisioterapeutas y los médicos del Baskonia, cuyo trabajo irá enfocado básicamente a que adquiera una masa muscular mucho más notoria. Lo ideal sería también que engorde varios kilos, aunque sin poner con ello en peligro el delicado estado de unas rodillas que en el pasado han acusado el frenético ritmo de partidos en un corto intervalo de tiempo.

El objetivo reside en que llegue en "condiciones óptimas" al inicio de la pretemporada. Pese a que todavía es una incógnita la configuración interior del Baskonia para la próxima temporada y es seguro que volverá a tener por delante en la rotación a dos cincos, todo hace indicar que su protagonismo ganará enteros y dispondrá de más oportunidades. En el curso recién finalizado, Diop ha participado en 35 de los 62 partidos oficiales disputados por el cuadro vitoriano con una media de 10 minutos. Las continuas lesiones de Lamont Hamilton hicieron viables sus esporádicas apariciones.

Pese a sus errores derivados de la inexperiencia, su entusiasmo y sus ganas de agradar fueron en todo momento apreciadas por un público desencantado por el escaso espíritu combativo de un grupo apático en defensa. La efervescencia del senegalés se tradujo incluso en piques dialécticos con pívots curtidos en mil batallas. El más sonado tuvo lugar con el madridista Bourousis en uno de los primeros encuentros correspondientes a la fase regular.