vitoria. Tibor Pleiss es, además de un notable proyecto de baloncestista, un tipo sensato y con la cabeza bien amueblada que, a diferencia de muchos jóvenes de su edad, mide a la perfección los pasos que protagoniza en su todavía corta carrera profesional. Salvo que algún coloso del Viejo Continente se vuelva loco y presente en el Fernando Buesa Arena una proposición irrechazable por sus servicios, la próxima campaña continuará vistiendo la elástica del Baskonia a las órdenes de Sergio Scariolo. Sin embargo, a medio plazo, posiblemente a partir del ejercicio 2014-15 cuando haya ganado ya un valioso año de experiencia, tiene previsto cruzar el charco para dar con sus huesos en Oklahoma, donde la franquicia de Kevin Durant le espera con los brazos abiertos tras escogerle en segunda ronda del draft del 2010 con el número 31.

Antes de que se llegue ese momento soñado por cualquier promesa como él que da los pasos iniciales en el mundo de la canasta, el espigado poste alemán no pretende ser un desconocido para la familia de los Thunder. Cuanto antes desea familiarizarse con el entorno, intercambiar impresiones con los técnicos que moldearán su carrera al otro lado del Atlántico y, en definitiva, conocer los entresijos del equipo en el que iniciará su, a priori, longeva andadura en la NBA. Bajo estas premisas se enmarca el viaje de una semana a Estados Unidos que, previa invitación de los directivos, acaba de concluir para presenciar in situ las evoluciones de Oklahoma City en la Liga de Verano de Orlando, uno de los lugares escogidos por los jugadores sin contrato garantizado en el mejor torneo del mundo para exhibirse ante los ojeadores en lo más parecido a un mercado persa.

En todos estos días, Pleiss ha mantenido un contacto directo tanto con Sam Presti como con Scott Brooks, el manager general y técnico de la franquicia poseedora de sus derechos. Ambos ya poseen los pertinentes informes del papel desplegado el pasado curso por el teutón en la capital alavesa. Johnny Rogers, aquel pelirrojo pívot que actuó durante infinidad de campañas en el baloncesto español, ha sido el encargado de seguir todos sus pasos como scout de Oklahoma para Europa. Aunque la evolución de cualquier jugador puede ser seguida hoy en día con facilidad gracias a los videos e internet, nada mejor que un contacto en primera persona para que las dos partes vayan profundizando en un conocimiento mutuo que promete dar muchas noches de gloria si Pleiss mantiene su progresión.

entrenos privados El contrato de tres campañas que todavía le ata al Baskonia ha sido, lógicamente, un impedimento para que se haya vestido de corto en los cinco partidos disputados por Oklahoma ante los Rockets, los Pacers, los Magic, los Pistons y los Sixers. Sin embargo, según afirma la prensa local, el internacional alemán ha podido realizar algunos entrenamientos privados para dejar indicios de que se encuentra sobradamente preparado para fajarse dentro de uno o dos años con los mejores interiores del planeta.

Oklahoma tiene previsto elaborar un plan específico de trabajo con el fin de que se aclimate sin problemas a una competición donde el físico adquiere una importancia capital. En este sentido, Pleiss es conocedor de que a sus 23 años deberá sudar de lo lindo en el gimnasio para ganar varios kilos y muscularse convenientemente si aspira a emparejarse con pares fornidos que amenazan con aprovechar su todavía liviano cuerpo. Al tratarse de un siete pies bastante ágil, móvil y con unos brazos enormes, la consecución de un físico más imponente debe proporcionarle un rol estelar en un conjunto que malvive desde hace tiempo por la falta de un cinco dominante que complemente a un perímetro espectacular. A poco que el alemán evolucione, los rectores de los Thunder confían en que será el complemento perfecto para Serge Ibaka en la pintura.

El Baskonia, en cualquier caso, no ha sido ajeno a este desplazamiento emprendido por su integrante. De hecho, accedió sin problemas a quepermaneciera una semana en Oklahoma consciente de la importancia que entrañaba para el alemán el hecho de seguir dándose a conocer ante sus futuros jefes en la NBA. En el club reina, además, cierta tranquilidad sobre su futuro después de que Pleiss confirmara a primeros de mayo en su blog personal que su marcha a Estados Unidos todavía puede esperar. "Pienso en la NBA en el medio plazo y no quiero hablar mucho de ello. Tengo tres años de contrato en Vitoria y seguiré en el Laboral Kutxa la próxima temporada", concretó. En el vínculo que suscribió con el club alavés, existe una cláusula el próximo verano que facilitará su gran sueño.