Vitoria. Como el transbordo de un largo viaje, el encuentro de ayer -lo apacible de su desarrollo contribuyó a ello- no fue sino un punto intermedio en el complicado periplo europeo que vive el Baskonia en este arranque de campaña. El grueso de los jugadores azulgrana que fueron requeridos por la prensa tras el partido tenían gravado un desplazamiento a fuego en sus mentes: Milán. Cabezas lo corroboraba ante las cámaras: "Lo primero que hemos dicho tras el partido, es que el jueves hay que ganar en Milán, aunque sabemos que va a ser complicadísimo".
Ahora vendrá Milán y más tarde el Real Madrid y después el Efes y luego el Barcelona... El calendario inmediato baskonista da miedo. Por ello los integrantes del plantel azulgrana restaban mérito al triunfo y pasaban página de manera automática. Su cabeza estaba en la capital lombarda.
Probablemente también la de Dusko Ivanovic pero al técnico montenegrino no se le cuestionó a este respecto tras el encuentro de ayer. Sin embargo, de manera indirecta, el preparador baskonista aludió a ese futuro a corto plazo mediante el análisis de la progresiva integración en la dinámica del equipo de los que no lo estaban. Este factor es crucial para competir en Europa e Ivanovic lo sabe. No obstante, saben asimismo los que le conocen -únicamente desde su faceta profesional- que el técnico juega con los que están física y mentalmente. Si son cinco, son cinco. Para el que no lo tuviera claro, el propio Ivanovic lo confirmó de manera diáfana: "Mi primera intención era no dar minutos. Yo no regalo minutos, no estoy para regalar nada".
Tajante, como de costumbre, Ivanovic ahondó en un par de ejemplos de diferencias sustanciales. Prosiguió el técnico asegurando que su "intención era que, por ejemplo Fabien (Caseur) que ha tenido la mala suerte de entrar en los últimos tres partidos en mal momento y no pudiera coger ritmo, cogiera ritmo". "Y lo ha aprovechado bien", confirmaba.
Otro de los jugadores que, para él, hizo buen uso de su ración de minutos sobre el parquet fue Milko Bjelica, aunque se cuidó de matizar muy mucho este extremo. "Milko también ha aprovechado sus minutos pero, tal y como estaba, es fácil mejorar", explicó. "Estaba totalmente fuera de forma. Ahora... le falta mucho. Ha jugado mejor que otros días pero es evidente que todavía no está en forma", aclaraba el montenegrino.
Más allá de perfiles personales durante el encuentro, Ivanovic destacó que el equipo había "entrado muy serio en el partido, con buena defensa, metiendo canastas fáciles...", aunque reseñó que "no sólo en este partido, tenemos de una manera inexplicable, un poco de bajón". "No mucho", matizaba, "pero cuando juegas contra equipos de mucha calidad, este poco que bajas, lo notas mucho".
Habrá que cuidar esos detalles para optar a la victoria en Milán y habrá que contar con el total de los jugadores de la plantilla que no estén lesionados para viajar con una rotación de garantías. Las bases se han sentado, ahora sólo queda esperar al jueves. Al que ya es el partido de la temporada para este Baskonia 2012-13.