Mirza Teletovic enfilaba el camino al vestuario en el descanso con una estadística impoluta. De los 49 puntos con los que el Caja Laboral parecía encarrilar el partido tras los dos primeros cuartos, el bosnio había notado 21, 19 de ellos en el primer cuarto. La perfección se estaba adueñando de su muñeca. Cinco triples de cinco intentos, tres de tres en tiros de dos, máximo reboteador del partido hasta el momento... La noche se anticipaba emocionante. Sin embargo, de regreso al parqué para encarar la segunda parte, el ala-pívot azulgrana fruncía el ceño errando dos triples consecutivos en apenas un minuto. Sus guarismos empezaban a empañarse. Finalizado el tercer periodo, Teletovic seguía con los mimos puntos en su casillero con los que empezó. Pero lo que parecía un descenso en picado no era sino el descanso del guerrero.

Faltaban cinco minutos para el final y el Gran Canaria 2014, pegado siempre a los vitorianos en el marcador como una lapa bañada de Loctite, iluminaba el marcador del Buesa Arena con un apretadísimo 71-69. Fue entonces cuando el capitán del Baskonia, consciente de que el equipo necesitaba de nuevo su muñeca ya legendaria, se elevó sobre el parqué para subir de nuevo la moral azulgrana hasta niveles épicos. Un triple tras asistencia de Pau Ribas -excelente ayer en su defensa a Jaycee Carroll- situaba el 74-69. No contento con ello, Teletovic recuperó un balón inmediatamente para, posteriormente y con canasta del escolta mormón de por medio, enlazar un segundo triple con el que puso punto final a su estadística anotadora. Ya no era necesario que volviera a poner a prueba su puntería.

Preocupados por el nivel demostrado hasta el momento por el jugador nacido en Mostar, recién salido de un lesión -se perdió el duelo ante el Lagun Aro por precaución-, los pupilos de Pedro Martínez dejaron sin marca a un Marcelinho Huertas -bien defendido hasta entonces, con ayudas constantes y presión a mitad de cancha- que mataba el choque con un triple (83-78 a falta de treinta segundos) y dejaba la noche sentenciada definitivamente. En la última jugada del partido, Mirza Teletovic -que acabó con 7 de 11 en triples- quiso mostrar su faceta mas espectacular con un alley oop a pase de Brad Oleson.

Pero la canasta estaba ya fuera de tiempo. No importó. La bocina sonó mientras el rostro del bosnio todavía dibujaba una amplia sonrisa. Era la satisfacción del trabajo bien hecho. Los 33 puntos de valoración con los que Teletovic finiquitó ayer el primer partido de estos cuartos de final le convirtieron en el primer MVP de la jornada en estos play off. Un éxito basado no sólo en su potencial anotador, sino en un gran trabajo defensivo colaborando con hombres como Pau Ribas a la hora de defender a Carroll cuando la situación lo requería. "Habíamos preparado mucho la defensa a Carroll, pero sabíamos que el Gran Canaria no es sólo él. Hemos sufrido un poco para ganar, pero cuando pasa esto al final la victoria es más dulce. Si jugamos de la misma forma en su cancha podremos ganar otra vez", vaticinaba el jugador antes de abandonar el pabellón de Zurbano. El cuatro baskonista, "inconmensurable en la primera parte" según palabras de Pedro Martínez, alzó ayer su voz más alto que nunca.