La NBA se está preparando para un posible lockout a partir del 1 de julio y empieza a tomar medidas para que el cierre patronal no le pille desprevenida. El último movimiento ha sido suspender la prestigiosa Liga de Verano de Las Vegas, que congregaba en la ciudad del estado de Nevada a numerosos jugadores veteranos y rookies con pocos minutos de juego para disputar una competición de unos 10 días alrededor del 9 de julio.