vitoria. Un nuevo título para San Emeterio. Otro más en un año para enmarcar. El alero cántabro ha sido el jugador más valorado de la Euroliga. El baskonista ha superado a jugadores de la talla de Diamantidis, Spanoulis o Juan Carlos Navarro entre otros. El más completo de todos. Los números así lo reflejan.
El exterior azulgrana ha promediado en estos 20 partidos de competición continental 33:47 minutos, con 13,7 puntos, 5,5 rebotes, 2,4 asistencias, 0,8 robos, 1,5 pérdidas y 4,7 faltas recibidas para una valoración total de 19,05. La más alta de todos los jugadores de la Euroliga.
Un premio que debe servirle además para ser elegido, salvo sorpresa mayúscula, en uno de los dos mejores quintetos de la competición. De momento, méritos para ello ha hecho. San Emeterio ha sido el jugador más valorado hasta ahora.
Por detrás del todopoderoso alero baskonista han acabado Diamantidis (17,75), Freeland (17,47), Spanoulis (14.3) y Bourousis (14,17). San Emeterio ha demostrado ser el más regular de todos ellos. El baskonista ha brillado este año en casi todos los apartados del juego, además lo ha hecho en partidos calientes, cuando estaba en juego la clasificación y encima en varias ocasiones en los momentos de la verdad cuando el balón quema. A él no. Así por ejemplo, cuando el Caja Laboral necesitaba ganar en Vilnius para asegurar su pase al Top 8 y hacerlo como primero de grupo, el jugador azulgrana se echó al equipo a la espalda y logró una actuación impresionante ante el Lietuvos en la que alcanzó su tope personal de valoración, 37, y atrapó 12 rebotes, que también son su mejor marca, registros que le sirvieron para ser nombrado MVP de la semana en la última jornada del Top 16.
soberbio en el 'top 16' Un partido de ensueño. No ha sido el único del curso. De hecho, hasta en otras siete ocasiones ha superado ampliamente la veintena de puntos de valoración, además en algunos casos ante rivales de entidad, como contra el Maccabi (29 puntos en el top 8 y 28 en la liguilla) o frente al Panathinaikos en el Top 16, donde se fue hasta los 27 y Lietuvos en esta misma liguilla cuando acabó con 24. Completan la lista de partidos en los que San Emeterio rebasó la veintena de valoración el Zalgiris y Partizan en la primera fase con 29 y 23 puntos respectivamente y el Unicaja en el Top 16 con 22.
Regularidad máxima. Así ha sido la temporada de San Emeterio en la Euroliga. Con registros sobresalientes. Su valoración media en los seis partidos del top 16, que alcanzó la friolera de 23,3 puntos lo constata. El cántabro es un jugador sin fisuras. Muy regular y con mínimos altibajos. De hecho, en esta temporada tan sólo dos equipos han conseguido que se quedase por debajo de los diez puntos de valoración en estos 20 partidos -Maccabi en dos ocasiones en el Top 8, con 8 y 7 puntos y el Zalgiris con cuatro en la primera fase-. Tan sólo han sido tres partidos. En los otros 17 ha estado por encima. Muy, muy por encima para lograr esa valoración media de 19,05 puntos.
Una cifra que ha conseguido gracias a unos registros más que notables en casi todos los apartados de la estadística. Sin ser el mejor en cada uno de ellos, sí que ha estado entre los diez mejores en los principales, casos de la anotación y rebotes. Por ejemplo, en el apartado anotador, en 15 ocasiones igualó o rebasó la decena de puntos, mientras que en tres partidos, Zalgiris, Maccabi y Panathinaikos consiguió 21, su mejor registro de la actual campaña en la Euroliga. En cuanto a los rebotes, siempre estuvo por encima de las dos capturas y además de las 12 ya citadas ante el Lietuvos, destacan las 11 que cogió ante el Maccabi en el primer partido de la competición y las 8 lograda de nuevo otra vez tanto ante el cuadro hebreo como lituano.
Por último, hay que constatar que sus porcentajes de tiro han sido sobresalientes. En tiros de dos, el cántabro ha firmado un 60,7% (65/107), en triples un 50% (30/60) y en tiros libres un 77,1% (54/70). Números, que le han servido para consolidarse como el más completo de la Euroliga.