Vitoria. El Baskonia busca soluciones antes de que se produzcan los problemas. Atento en todo momento al mercado, el club vitoriano ya ha movido sus fichas para que su nivel deportivo no descienda si se acaba produciendo la salida de Lior Eliyahu con rumbo a Tel Aviv. Marcus Haislip es el elegido por los responsables azulgranas para cubrir esa más que probable marcha del israelí al Maccabi y las posturas con el pívot estadounidense se encuentran muy cercanas al acuerdo, a la espera, eso sí, de que quede libre un hueco para el jugador. En el momento en el que el Baskonia y el Maccabi alcancen un acuerdo para cerrar el traspaso de Eliyahu, y de no torcerse las cosas o dilatarse mucho en el tiempo la operación, Haislip se pondrá a las órdenes de Dusko Ivanovic.

El interés del Baskonia por hacerse con los servicios del pívot (29 años y 2,07 metros) que la pasada temporada militó en el Panathinaikos no es nuevo. Ya hace un mes le trasladó el club vitoriano al cuatro de Tennessee una oferta que en ese momento no fue aceptada por el jugador y, entonces, el cuadro azulgrana activó la opción de hacerse con los servicios del inglés Pops Mensah-Bonsu.

Pero, pese a esa primera negativa inicial, las dos partes no llegaron a distanciarse definitivamente en ningún momento y fue posteriormente el propio Haislip quien manifestó al Caja Laboral su disposición a firmar una vinculación. El problema para la entidad azulgrana residía, y lo sigue haciendo, en su falta de fichas para incorporar nuevos jugadores si no cuentan con la nacionalidad española, por lo que la opción del fichaje está en punto muerto hasta que pueda concretarse la salida de Eliyahu.

En este sentido, desde la oficinas del Buesa Arena se continúa esperando a que el propio pívot israelí o el Maccabi trasladen una oferta económica que cumpla con las pautas habitualmente exigidas por Josean Querejeta. Todo se reduce, que no es poco, a la percepción de una compensación monetaria por el traspaso de un jugador que, tras apenas un año en Vitoria, arde en deseos de regresar a su club de origen, donde también se le espera con los brazos abiertos.

Las posturas son claras. Eliyahu y el Maccabi ya cuentan con un acuerdo para el regreso del cuatro a su país, pero a la operación le falta la indemnización a un Caja Laboral que no está dispuesto a dejar escapar gratis al talento hebreo, quien, a pesar de sus muchos problemas físicos, dejó muchas acciones memorables en su primera temporada en Vitoria.

De la decisión del Maccabi de pagar o no por el traspaso de Eliyahu depende ahora el futuro de un jugador que, una vez concluya la disputa del Preeuropeo el próximo domingo, tendrá que incorporarse a los entrenamientos a las órdenes de Dusko Ivanovic a principios de la próxima semana. Así, las próximas horas pueden resultar claves para la resolución de una negociación que viene de lejos.

Si finalmente las tres partes alcanzan el acuerdo deseado, el Baskonia se pondrá manos a la obra para cerrar los últimos flecos de su negociación con Haislip. Con la llegada del estadounidense, Ivanovic podría contar con un cuarteto de pívots muy versátil junto a Mirza Teletovic, Pops Mensah-Bonsu y Stanko Barac, con capacidad para anotar desde el exterior y una tremendo poderío físico bajo los aros para intentar mitigar entre todos el enorme hueco dejado por Tiago Splitter en la pintura y que dejaría cerrada la plantilla a expensas de un último fichaje con pasaporte español.