- El Gobierno central ha incluido en el proyecto de presupuestos del Estado para 2021 una inversión de 23,2 millones de euros que se destinarán al necesario sistema de almacenamiento, la mayor parte de materiales contaminados, mientras se lleva a cabo el desmantelamiento de la central nuclear de Garoña. El comienzo del proceso de desmantelamiento está previsto para 2021, proceso que se desarrollará durante por lo menos diez años.

De momento, en esta primera fase se va a proceder al vaciado de la piscina, que sirve para refrigerar las turbinas que tiene, en estos momentos, el material radiactivo, las barras de combustible, que serán trasladadas en su momento a un cementerio nuclear. Este material se debe sacar y guardar en unos depósitos especiales, tras haber reducido su temperatura, tarea que es la que se realizará durante el próximo ejercicio.

Con esta cuantía presupuestaria se prevé acometer la primera fase, que se prevé que se prolongue durante tres anualidades, en las que se actuará sobre el vaciado de la piscina para el desmantelamiento de las turbinas, los procesos burocráticos y documentación y las labores de vigilancia.

Con el comienzo de la pasada primavera, pero coincidiendo con el comienzo de las incidencias que han salpicado la vida de ciudadanos y empresas como consecuencia de la pandemia, el Consejo de Ministros encargó a la Empresa Nacional de Residuos Radioactivos (Enresa) a llevar a cabo el procedimiento negociado sin publicidad para la compra de los 44 nuevos contenedores que se precisan para almacenar el combustible gastado de la central nuclear de Santa María de Garoña. En ese momento ya había cinco que Enresa había comprado en 2012.

El presupuesto partió de una cifra superior a los 127 millones de euros, pero finalmente se incrementó la necesidad de gasto hasta los 140,3 millones. Ese contrato se negoció y adjudicó a la empresa Equipos Nucleares, que redujo el precio hasta 138,2, casi 11 más de los previstos inicialmente, pero 2 menos de la cifra finalmente ofertada por la empresa estatal.

Estos contenedores son claves en el proceso, porque su función es servir como depósitos que se guardarán en el Almacén Temporal. Sin embargo, los primeros no llegarán hasta septiembre de 2023, lo que supone un adelanto de cuatro meses con respecto a lo establecido en el pliego de condiciones, y, a partir de ese momento, se entregará uno cada quince días hasta completar el pedido de 44.

23,2

Son los millones incluidos en el proyecto presupuestario del gobierno de coalición PSOE-Podemos.