12/septiembre/1954

eintiún años, cinco meses y diecisiete días después de su primer descenso a Segunda -26 de marzo de 1933-, el Deportivo Alavés regresa a la máxima categoría futbolística estatal: Primera División. Lo hace en un campo mítico: San Mamés. Frente a un rival histórico: Athletic. ¡El Glorioso ha vuelto!

La campaña anterior, 1953-54, de manera brillante, el equipo albiazul se ha proclamado campeón del Grupo I (Norte) de Segunda División -en dura pugna con otro conjunto vizcaíno: Baracaldo-, logrando un ascenso largamente soñado y deseado por la familia alavesista. ¡Cuánto se ha sufrido en estos más de veintiún años!

Renunciar a jugar en Segunda (1934-35); Asambleas en las que se debatió la supervivencia del club; Ocho temporadas consecutivas en el ‘infierno’ de Tercera División. Descensos a Regional no consumados (1947-48 y 48-49); Mendizorroza cayéndose a pedazos. Economías al borde de la quiebra total; Huida de socios, aficionados y seguidores. ¡Esto ya ha pasado y ahora hemos regresado a Primera División!

La temporada 1953-54 se ha saldado con un déficit de 235.357,68 pesetas, a las que hay que añadir otras 133.706,54 que se arrastran de la 1952-53. Gracias al aval de la Diputación Foral -que cubre un déficit de hasta 300.000 pesetas- y la generosidad del Ayuntamiento para el pago aplazado de los impuestos y la condonación del alquiler de Mendizorroza, se ha conseguido que la situación financiera no sea uno de los temas que más preocupen a la Directiva que preside el industrial alimentario Carlos Caballero.

Se vuelve a confiar la dirección técnica a Manolo Etxezarreta y la continuidad del de Irún logra que casi toda la plantilla del ascenso, siga una campaña más en Mendizorroza. Como refuerzos van firmando el medio eibarrés ‘Kaiku’; los delanteros Wilson y Roth -ambos cedidos por el Real Madrid en la ‘operación’ Berasaluce- y los extremos Erdozia -que en abril de 1954 se había proclamado campeón del mundo juvenil- y el mirandés Iborra. También llega el delantero Carlos Uncilla, que no se estrenará en la máxima categoría.

El lunes 12 de julio el sorteo depara que el Deportivo Alavés comience la Liga en Bilbao frente al Athletic, el domingo 12 de septiembre de 1954. El mismo día del partido, y antes de desplazarse a la capital vizcaína, los jugadores oyen misa en la capilla de la Virgen Blanca, en la Iglesia de San Miguel, ofreciendo un ramo de flores a nuestra patrona.

San Mamés registra una gran entrada, notándose la presencia de gran número de seguidores albiazules en las gradas. ¡No quieren dejar solos a los suyos en su reestreno! El Deportivo Alavés es recibido con una tremenda ovación. ‘Zarra’ y Erezuma son los capitanes. El Deportivo Alavés desde el principio está irreconocible -presa de los nervios- y no es el conjunto difícil de doblegar y batir que se esperaba. ¡Este no es mi Deportivo Alavés, me lo han cambiado!

El Athletic vence por 4-0, pero el encuentro se ve empañado por dos entradas -al borde del reglamento- del rojiblanco Venancio sobre dos debutantes albiazules: Roth y Wilson. Tras el partido los ánimos están muy encendidos en la caseta albiazul y el presidente Carlos Caballero acusa a Venancio: “Por tres veces fue a cazar alevosamente a Wilson, tras hacerlo antes con Roth, pero Mendizorroza será otra historia. Somos unas monjas”. No ha sido la reaparición soñada por el Deportivo Alavés y sus seguidores, cuatro goles en contra y la amargura de la lesión de dos de sus refuerzos estelares. ¡Jornada amarga!

El gallego Wilson Jones -fallecido el pasado 12 de julio- tuvo que retirarse quince minutos antes de la finalización del encuentro de San Mamés y reapareció el 3 de octubre. Por su parte el madrileño Julio Roth no volvió hasta el 14 de noviembre.

Los albiazules tenían dos curiosas primas -además de la oficial del club- por parte de aficionados, en caso de puntuar. La primera era una caja de botellas de coñac por cabeza y la segunda 400 limpiezas de pares de zapatos ofrecida por un ‘limpia’.

También podía haber escrito sobre...

12 de septiembre de 1943.

Jacinto Quincoces torea un becerro, en un festival taurino a beneficio del Deportivo Alavés.

12 de septiembre de 1970.

El Deportivo Alavés disputa su primer partido en Primera Regional. Vence al Mutriku (1-0).

12 de septiembre de 1971.

Primer partido oficial con luz artificial en Mendizorroza. Deportivo Alavés-Boetticher (2-0).