El castigo a Mariano Díaz y Moussa Diarra, los dos futbolistas del Deportivo Alavés que se quedaron fuera de la convocatoria el pasado miércoles para el partido de Copa ante el Sevilla, se prolonga de cara a la última cita del año 2025 en El Sadar frente a Osasuna.

Así lo ha confirmado Eduardo Coudet en la previa de este viernes, aunque el técnico argentino ha evitado nuevamente explayarse sobre su ausencia en un caso con diferentes aristas que va más allá de lo estrictamente deportivo.

Simplemente se ha limitado a señalar que siguen fuera del equipo "por decisión técnica" y por lo tanto ni siquiera serán un revulsivo para algún momento del citado encuentro pese a las ausencias con que cuenta el equipo tanto en la defensa como la delantera.

De hecho, Lucas Boyé causará baja en tierras navarras y Toni Martínez será el único delantero disponible, al margen de Aitor Mañas, el futbolista madrileño del filial que fue titular ante el Sevilla y al que el Chacho elogió públicamente hoy.

"Tenemos a Mañas que le tocó jugar el otro día y lo hizo muy bien. También es importante para nosotros poder contar con los jóvenes del filial. Nos van dando una base en estos momentos que no somos muchos. Vamos a ver cómo se comporta el mercado con nosotros", subrayó Coudet.

Lo cierto es que el futuro de Mariano y Diarra se oscurece cada día más en el Deportivo Alavés, que coincidiendo con la próxima apertura del mercado invernal puede romper los lazos que le ata con ellos.

Hasta el encuentro frente al Sevilla, la Copa era una vía de escape para ellos y ambos lograron reivindicarse en cierto modo ante los primeros rivales en esta competición. Sin embargo, todo cambió en el duelo ante el Sevilla, en el que ninguno de los dos iba a ser de la partida.

Mariano y Diarra han sido dos de los jugadores albiazules que apenas han contado minutos desde el comienzo de la temporada y su situación se ha vuelto ya prácticamente insostenible en Vitoria. El punta hispano-dominicano tiene contrato en vigor hasta 2027 tras comprometerse con el Alavés en el último mercado estival, mientras que el defensa maliense está atado hasta 2028.