El Deportivo Alavés aterriza en Sevilla para medirse este viernes al Real Betis en la segunda jornada de Liga. La plantilla de Coudet llega tras hacer los deberes en casa en el debut ante el Levante cuando el providencial gol de Tenaglia en el descuento sumó los tres primeros puntos de la temporada en el casillero albiazul.

Enfrente se encuentra un Betis que empató 1-1 en su estreno ante otro de los equipos recién ascendidos a la máxima categoría, el Elche de Eder Sarabia. El postrero gol de Germán Valera privó a los béticos de lograr la victoria en su visita a los ilicitanos.

El Glorioso disputa el primer partido de su historia en el Estadio de La Cartuja, feudo que desde este verano será el hogar de los verdiblancos hasta 2027.

Las obras del Benito Villamarín, que está sufriendo una gran remodelación, han hecho que el equipo de Manuel Pellegrini tenga que desplazarse hasta el estadio libre de la ciudad para poder ejercer como local en sus partidos.

Sin precedentes para el Alavés, el dato respecto a los partidos jugados en el recinto de su exilio no es muy satisfactorio para el Betis, donde no ha ganado ninguno de los cinco encuentros oficiales jugados en La Cartuja (3 empates y 2 derrotas).

Pese a ello, el último recuerdo verdiblanco es muy positivo, ya que vuelven a un lugar donde se proclamaron campeones de la Copa del Rey de 2022 al ganar por penaltis al Valencia.

De este modo, el Alavés llega a la capital andaluza en busca de un resultado positivo que pueda seguir en la línea de lo visto en la primera jornada. La victoria sería un resultado magnífico a la par que histórico, puesto que el Alavés tan solo ha encadenado dos victorias en las dos primeras jornadas de liga una vez en su historia (temporada 2001-2002).

Choque de estilos

Se miden dos equipos con prestigiosos entrenadores sudamericanos. Por un lado, Pellegrini afronta su sexta campaña en el conjunto verdiblanco. El chileno, que siempre propone un estilo de juego más elaborado y muy ofensivo, tratará de encontrar las debilidades defensivas de los albiazules.

Por otra parte, el Chacho Coudet, con un fútbol más directo y bien definido, buscará aprovechar sus oportunidades en campo rival. En enero de este mismo año el Alavés ya salió a hombros del Benito Villamarín en un partido en el que venció 1-3 gracias al hat-trick de Kike García.

Como curiosidad, cabe destacar el hecho de que Pellegrini dirigió a Coudet en River Plate, justo antes de que el chileno pusiera rumbo a España donde más tarde entrenaría a Villarreal, Real Madrid y Málaga. Ambos fueron campeones de Argentina con el conjunto de la franja en la temporada 2002-2003.

Pellegrini, centrado en lograr la primera victoria del curso, asume que su plantilla aún no está cerrada al faltarle piezas para su definitiva configuración, además de tener a gente importante lesionada como Marc Roca, Diego Llorente, Abde, Isco Alarcón y Nelson Deossa. Aún así, el experimentado técnico no puso excusas en la previa al partido y aseguró que irá a ganar para renovar ilusiones.

¿Once idéntico al del Levante?

El Alavés sigue buscando las últimas piezas para su plantilla en esta recta final del mercado estival. La incorporación de, como mínimo, un central y un delantero es la tarea pendiente de la secretaría técnica albiazul que se mide a un equipo en una situación similar.

Mientras Sergio Fernández sigue trabajando a destajo en los despachos, la obligación radica ir haciendo acopio de puntos en el arranque liguero y este viernes emerge una buena oportunidad para seguir engordando el casillero de puntos. Sobre todo, teniendo en cuenta que el Real Betis no ha arrancado la temporada de la mejor manera y sus jugadores de vanguardia –léase Chimy Ávila, Bakambu y Cucho– no atraviesan un dulce estado de forma.

Coudet podría repetir en tierras sevillanas el mismo once inicial que ante el Levante, aunque está por ver si el argentino repite las mismas posiciones que en la primera jornada cuando Otto y Parada se incrustaron en los dos laterales y Tenaglia en el eje junto a Garcés.