Por primera ocasión en el último año y medio, desde que el Alavés logró su regreso a la máxima categoría, el conjunto vitoriano finaliza una jornada en puestos de descenso. El enorme despliegue físico realizado por los pupilos de Coudet frente al Barcelona fue en vano para poder puntuar en Montjuic, y la derrota sufrida en feudo culé –la segunda en liga tras el cambio de técnico– lleva a la escuadra albiazul a ocupar la 18ª posición con 21 puntos, dos menos que el Espanyol, que sí dio la sorpresa el sábado en su examen frente al Real Madrid.Y eso que el Deportivo Alavés dio la cara ante el Barcelona, pero no es menos cierto que el equipo se quedó corto en Montjuic. La diferencia técnica y de profundidad de banquillo entre ambos contendientes fue suficiente para que un solitario zarpazo de Lewandowski certificase los tres puntos para el cuadro de Flick.

En cualquier caso, el Glorioso no se lo puso especialmente fácil al Barcelona y durante varios tramos del encuentro constituyó un duro hueso de roer, sobre todo en una primera mitad brillante a nivel defensivo. El Deportivo Alavés mostró una de sus versiones más solidarias y aguerridas en su puesta en escena en Montjuic.

Titánicos. Los once guerreros elegidos por Coudet llevaron al Barcelona a un encuentro de lo más terrenal, sin ofrecer apenas respiro en ataque y con un despliegue físico que permitió que Owono disfrutase de un primer tiempo relativamente plácido. 

Mouriño, destacado en Montjuic, evita el remate de Lewandowski en el área de Owono Efe

De hecho, el guardameta babazorro tan solo tuvo que intervenir en un par de acciones sin excesivo peligro, pues el equipo vitoriano mantuvo un cerrojo atrás con el que el Barcelona mostró síntomas de desesperación.

Uno de los nombres propios de la escuadra albiazul fue Mouriño, quien regresó al once después de cuatro jornadas y lo hizo cumpliendo con nota en su emparejamiento ante un ariete de la talla de Lewandowski. El uruguayo fue superior a su pareja de baile en cada uno de los duelos y no hubo manera de derribarlo en las disputas.

Kike García protege el balón ante la presión de Frenkie de Jong La Liga

Sin mordiente arriba

Sí que se echó en falta una dosis de precisión en las fases con balón, pero lo cierto es que el Barcelona manejó la línea del fuera de juego con suma maestría. Aun así, el Deportivo Alavés no se descentró en ningún momento y llegó al descanso con un valioso botín y la sensación de haber manejado el ritmo del encuentro sin excesivos apuros.

Como era de esperar, el Barcelona introdujo varios cambios en el entretiempo y subió una marcha tras la reanudación del encuentro. Al Deportivo Alavés le llegó el momento de sofocar un incendio provocado especialmente por Lamine Yamal, un constante quebradero de cabeza en la banda.

Lewandowski hizo el único gol del partido La Liga

Y en un remate del propio Lamine que cambió su trayectoria tras golpear en la espalda de Tenaglia, Lewandowski estuvo atento para certificar el primer y único tanto de la velada. Por cierto, el séptimo que firma el polaco en sus cuatro encuentros ante el Deportivo Alavés, que ya se postula como su víctima predilecta.

Coudet agitó el árbol en busca de alternativas ofensivas en el epílogo, pero sus modificaciones, probablemente tardías, resultaron en vano. No hubo manera de llegar al área rival con la amenaza suficiente como para incomodar a Szczesny, y el mayúsculo esfuerzo defensivo del conjunto albiazul terminó siendo en vano. 

Ahora, una vez concluida la visita a Montjuic, las esperanzas para escapar de los agónicos puestos de descenso pasan por un mes de febrero con duelos de altísimo voltaje ante rivales directos como el Getafe, el próximo domingo en Mendizorroza, el Leganés y el Espanyol.