Joaquín Panichelli, futbolista del Deportivo Alavés cedido esta temporada en el Mirandés, ha recibido esta mañana el alta hospitalaria y ya está descansando en su domicilio. El argentino sufrió este miércoles un terrible golpe en la cabeza durante la disputa del encuentro entre los rojillos y el Sporting y, afortunadamente, esa escena se ha quedado en un susto. Así lo ha comunicado el club jabato después de que el delantero haya pasado la noche en observación en el hospital.
La acción, sin duda fortuita y que obligó a interrumpir el partido, dejó a Panichelli convulsionando sobre el césped y fueron los servicios médicos allí presentes los que tuvieron que asistirle y llevarlo en ambulancia al Hospital Santiago Apóstol de la localidad burgalesa. “Practicadas las pertinentes pruebas médicas al jugador, el resultado del TAC ha sido normal y se han descartado lesiones asociadas en la cabeza a causa del golpe sufrido”, ha informado el Mirandés sobre las doce del mediodía.
Quien, sin embargo, no estuvo a la altura de las circunstancias fue el colegiado del encuentro, Moreno Aragón. Pese a ver el choque cabeza con cabeza muy de cerca, el madrileño no intervino y dejó acabar la jugada, poniendo así en peligro la integridad física de Panichelli y Eric Curbelo, el otro afectado. Una decisión que, como es obvio, retrasó la entrada del cuerpo médico del equipo jabato y también de la Cruz Roja.
Panichelli, de 22 años, llegó al Alavés en enero del 2023 y, tras un breve paso por el filial, Luis García Plaza le reclamó para el primer equipo. Jugó, y se lesionó, en la histórica final del Ciutat de València, reapareció el pasado mes de marzo contra el Barcelona y suma un total doce partidos como babazorro. En Anduva, hasta ahora, estaba siendo titular indiscutible gracias a su resiliencia y sus ocho goles como rojillo.