Una vez superado el tercer parón internacional de la temporada, el Deportivo Alavés regresa a la escena competitiva este sábado con su visita al Atlético de Madrid. Una incursión de gran envergadura en un escenario de escasas alegrías, pues el Glorioso ha encajado un pleno de derrotas en sus seis apariciones en el Metropolitano. Pero el de este fin de semana también constituye el escenario para calibrar las probaturas en la sala de máquinas, una cuestión que suele ser recurrente en las filas albiazules.
Desde el inicio de temporada en Balaídos, Luis García ha realizado todo tipo de variaciones en un centro del campo que, además de la continuidad de Guridi, Blanco, Guevara y Protesoni, se ha reforzado con dos perfiles enriquecedores como los de Stoichkov –mediapunta– y Joan Jordán. Entre otras, el técnico babazorro ha probado duplas formadas entre Guevara y Joan Jordán, Blanco y Guridi, aunque la más consolidada es la que forman Blanco y Guevara.
Precisamente uno de los éxitos de la entidad del Paseo de Cervantes se trató de mantener el centro del campo que tantas alegrías le dio la temporada pasada pese a los clubes de mayor entidad que intentaron pescar en Mendizorroza.
Eso sí, la dupla con mayor estabilidad en la base, en lo que a participación se refiere, es la que integran Blanco y Guevara. Ambos han formado pareja en tres de las últimas cinco jornadas ligueras y son dos integrantes de la vieja guardia albiazul desde la pasada temporada, donde fueron prácticamente indiscutibles en buena parte de la campaña.
En las últimas cinco jornadas, Blanco y Guevara tan solo en dos ocasiones no han sido de la partida simultáneamente. La primera fue en el choque frente al Rayo Vallecano –al que Blanco llegó entre algodones– y la segunda en la victoria ante el Mallorca, donde Protesoni fue titular aunque dejó su sitio a Guevara a los quince minutos. Tras la baja del uruguayo, la sala de máquinas la lideraron tanto el vitoriano como el andaluz durante el resto del encuentro.
Menos protagonismo
Dada la regularidad de Guevara y Blanco, Joan Jordán se ha quedado fuera de la ecuación durante el último mes. Ídem con Protesoni, quien tuvo la mala fortuna de caer lesionado en su regreso a la titularidad después de tres encuentros sin participación en Liga.
Lo cierto es que Joan Jordán dejó brotes verdes en su estreno como babazorro frente al Espanyol, donde fue el autor de una asistencia, pero ha perdido bastante trascendencia en las últimas semanas. No es fácil volver a la acción después de un año y medio tan duro no solo en lo futbolístico, sino también en lo mental, aunque no es menos cierto que el catalán atesora en sus botas la calidad que necesita el Deportivo Alavés en las acciones a balón parado.
Fue titular por primera ocasión en el choque frente al Sevilla y por última vez en la derrota frente al Getafe, y disputó también la eliminatoria al completo frente al Compostela. Sin embargo, el de Regencós no termina de destapar el tarro de las esencias y su rol, actualmente, no pasa del de un futbolista de rotación. Joan Jordán, que aterrizó en Mendizorroza en las últimas horas del mercado estival, acumula 415 minutos entre el campeonato doméstico y la Copa.
Dada la regularidad en las últimas semanas de Blanco y Guevara en la medular, Joan Jordán es quien se ha quedado fuera de la ecuación
Unos metros por delante de Guevara y Blanco, el faro en la mediapunta sigue siendo Guridi. Otro integrante de la guardia pretoriana de Luis García. El de Azpeitia constituye, desde hace dos campañas, una pieza inamovible en los esquemas del técnico albiazul. Y eso que el Deportivo Alavés se reforzó en verano con Stoichkov, un futbolista llamado a elevar la competencia en la zona de tres cuartos.
No obstante, el salto de Segunda División a la máxima categoría no es sencillo y Stoichkov demanda buenas dosis de paciencia para destronar a Guridi. En cualquier caso, son dos futbolistas de perfiles diferentes y de los que Luis García puede echar mano en todo tipo de contextos. Mientras que el exjugador del Eibar ha demostrado en varias ocasiones su capacidad para filtrar pases entre líneas, Guridi, por su parte, es quien equilibra la delantera con el centro del campo merced a su inteligencia táctica.
Ahora bien, si alguien confía en las aptitudes de Stoichkov y su adaptación a la Primera División, ese es precisamente Luis García. Tras la eliminatoria frente al Compostela, el técnico albiazul manifestó que “Stoichkov es un fichaje mío, lo he traído yo”. No en vano, su última titularidad en liga se remonta a la derrota frente al Barcelona del pasado 6 de octubre y ha disputado 568 minutos en liga, frente a los 693 de Guridi.