El Deportivo Alavés está inmerso en su peor dinámica de resultados desde su regreso a Primera División en la temporada 2022-23. El equipo dirigido por Luis García acumula cuatro derrotas consecutivas, un balance que pone en valor la suma de puntos conseguidos al inicio de la liga y, al mismo tiempo, obliga al plantel vitoriano a encontrar el tan ansiado punto de inflexión en su próxima visita a Vallecas.

Ahora bien, si algo ha demostrado el Deportivo Alavés desde la llegada de Luis García a su banquillo –entre otras cuestiones como un estilo de juego definido–, es la capacidad para sobreponerse a todos los varapalos.

De hecho, esta no es la primera ocasión en la que el Glorioso atraviesa una racha negativa con Luis García a los mandos. Sin ir más lejos, en la pasada campaña sufrió dos rachas de tres derrotas consecutivas en diferentes fases del curso.

La primera de ellas ocurrió en diciembre, cuando el equipo pagó muy caro el peaje de un calendario exigente. El Deportivo Alavés cayó frente al Las Palmas en casa, hizo lo propio a domicilio ante el Girona –revelación indiscutible de la temporada 2023-24– y cayó en Mendizorroza ante el Real Madrid. Tres partidos con un desenlace final de cero puntos, aunque cabe destacar que en los encuentros contra los conjuntos canario y merengue, el Alavés mereció, al menos, un empate.

Por suerte, tras la cruel derrota en el descuento frente al Real Madrid llegaron las vacaciones de Navidad. Y ese periodo fue clave para recargar las pilas de la plantilla y regresar del parón con la moral fortalecida. Así, el Alavés estrenó el año con un empate en Anoeta y una valiosa victoria en casa ante el Betis en Copa y el Sevilla en liga. 

La segunda racha de tres derrotas tuvo lugar en marzo y supuso el punto de inflexión que permitió cerrar la temporada con números dignos de un equipo europeo. Después de caer ante el Athletic en San Mamés, la Real Sociedad en Mendizorroza y el Granada en Los Cármenes, los de Luis García sumaron 14 puntos en las siete jornadas restantes.

Cabeza fría

Queda demostrado, por tanto, que el Glorioso, con Luis García a la cabeza, ha sabido salir airoso de sus malas rachas. Parte de esa fortaleza anímica reside en el compromiso del vestuario y en normalizar una mala dinámica de resultados. El propio Luis García ha manifestado en reiteradas ocasiones que, para un equipo de las características del Deportivo Alavés, es lógico atravesar fases con pocos puntos durante la temporada, y que no por ello debe cundir el pánico dentro del vestuario.

“Hay que saber convivir con los momentos malos, somos un equipo que lucha por salvarse”, declaró el técnico madrileño tras la dolorosa derrota sufrida frente al Valladolid en un encuentro que, si bien era pronto para catalogarlo como una final, sí que era de suma importancia para ampliar el margen respecto al descenso. 

Por ello, el equipo vitoriano marca la visita a Vallecas como un escenario clave para dejar atrás la racha de cuatro derrotas consecutivas. El Rayo Vallecano, con tres puntos más que el Deportivo Alavés, se perfila como una dura piedra de toque para que los albiazules den un golpe sobre la mesa. 

Tras el compromiso en Vallecas, el cuadro albiazul se enfrentará al Compostela en la primera ronda de Copa del Rey y, antes del tercer parón de la temporada, recibirá al Mallorca en Mendizorroza.

Cabe destacar que, desde que Luis García está al mando, el Alavés nunca ha encadenado cinco derrotas consecutivas. La última vez que el equipo vivió una situación similar fue en la temporada 2022-23, en Segunda División, cuando sufrió cuatro derrotas seguidas. Dos de ellas fueron ante rivales directos (Levante y Granada), lo que generó cierta inquietud en el entorno del club. Desde entonces, no se ha repetido una racha negativa de tal magnitud.

Derrotas consecutivas

  • Temporada 2024-25: Cuatro partidos
  • Temporada 2023-24: Dos rachas de tres partidos
  • Temporada 2022-23: Cuatro partidos (2ª División)
  • Temporada 2021-22: Cinco partidos
  • Temporada 2020-21: Cuatro partidos
  • Temporada 2019-20: Seis partidos
  • Temporada 2018-19: Tres partidos
  • Temporada 2017-18: Seis partidos
  • Temporada 2016-17: Tres partidos

En aquella ocasión, la Copa del Rey fue el escenario ideal para que el Glorioso recuperara sensaciones. Primero superó la segunda ronda ante el Mérida y después eliminó al Valladolid, un equipo de categoría superior en aquel momento. Esa victoria ante los pucelanos marcó un punto de inflexión ya que el Alavés fue consciente de que era capaz de derrotar a cualquier rival en la ardua lucha por el ascenso. 

Gracias a ese triunfo, el Glorioso volvió a mostrar su mejor versión en Mendizorroza, donde no perdió un solo partido en casa durante la segunda vuelta del campeonato. Tras el pase de ronda en Copa, el Burgos fue su primera víctima de liga en el feudo vitoriano, en un encuentro donde el Alavés mereció una victoria más holgada.

Echando la vista atrás, esta no es la primera vez que al Deportivo Alavés se le hace cuesta arriba ganar en Primera División. En la temporada 2021-22, que terminó con el descenso a Segunda, el equipo sufrió una racha de cinco derrotas consecutivas. En la 2020-21, la peor secuencia fue de cuatro derrotas, pero en las temporadas 2019-20 y 2017-18, el Glorioso llegó a encadenar hasta seis derrotas seguidas.