Pablo Ibáñez compareció este martes ante los medios de comunicación en la previa al partido del próximo viernes que enfrentará al Deportivo Alavés y Real Betis en La Cartuja de Sevilla. El choque correspondiente a la segunda jornada liguera será la primera vez en la que el equipo vitoriano visite el feudo que desde hace 5 años alberga la final de la Copa del Rey.

Otro debut fue el de Ibáñez con la camiseta del Glorioso en partido oficial. El centrocampista navarro, que el Alavés anunció como primer fichaje de la temporada el 23 de junio, inició su andadura en Mendizorroza el pasado sábado ante el Levante. Un estreno que para Ibáñez fue "inmejorable" debido al "gran ambiente" en la grada y el hecho de "marcar en el último minuto". "Fue una euforia muy grande, el ambiente fue espectacular y estuvimos muy contentos todos", comentó el mediocentro.

El pasado fin de semana no fue la primera vez que Ibáñez saltó sobre el césped de Mendizorroza. De hecho, su última vez fue en la jornada que cerró LaLiga 2024-2025 como jugador de Osasuna. Ibáñez explicó: "Ya había visitado el campo como visitante, pero tenía muchas ganas de hacerlo como local y fue increíble. El ganar en el 90' hizo que el estallido final fuera una locura y la celebración después del partido fue más de lo mismo".

El jugador quiso resaltar la importancia del comienzo liguero con victoria. Los inicios son "muy importantes" para un Ibáñez que cree que "marcan el devenir" del resto de la temporada. "Los equipos están a medio hacer y algunos pueden ir con dudas, por ello es clave estar bien tanto físicamente como mentalmente en estos partidos".

Adaptación

Durante estos dos meses veraniegos Ibáñez tuvo una rápida adaptación dentro del club vitoriano. El hecho de llegar el primero sumado a las pocas diferencias entre Alavés y Osasuna han hecho a Ibáñez sentirse muy satisfecho en la plantilla. "Me ha costado muy poco adaptarme porque vengo de un equipo parecido, de una ciudad similar y ha sido más fácil".

Compañeros como Ander Guevara hicieron más sencilla su adaptación. Ibáñez comentó sobre uno de los capitanes del Glorioso que "intenta que todos se involucren al máximo con la ciudad y el equipo". Tomar consejos de la gente que lleva más años fue "clave" durante la adaptación del navarro.

Pese a la rápida integración en la plantilla, Ibáñez admitió que "físicamente" ha sido "la pretemporada más dura" a la que se ha sometido nunca. "Nos han metido mucha caña pero lo que hemos sufrido esas semanas ahora mismo lo estamos disfrutando porque se nota que estamos físicamente muy bien todos y preparados para la Liga".