El Deportivo Alavés pone hoy (14.00 horas) a prueba su sólido estado de forma en la visita a Son Moix, donde calibra sus sensaciones a domicilio ante un Mallorca necesitado de victorias en su feudo. El conjunto vitoriano, mentalmente fortalecido tras el triunfo ante el Granada, busca aumentar el colchón de puntos con la zona roja y establecer una ventaja de ocho puntos respecto al equipo bermellón.

El Glorioso, eso sí, persigue su primera victoria del curso lejos de Mendizorroza ante una presa que se le ha escurrido históricamente. El Mallorca, como local, es toda una kryptonita para el conjunto albiazul, que no gana en territorio mallorquín desde la lejana temporada 1974-75. De 16 encuentros en Mallorca, el Deportivo Alavés tan solo ha ganado uno. Este mediodía emerge una buena oportunidad para cambiar el signo de la historia a tenor del desigual estado anímico de unos y otros.

El deseo del Alavés de romper los fatídicos precedentes choca con la necesidad del Mallorca para enderezar su rumbo. Y es que el equipo del discutido Javier Aguirre tiene señalado el choque ante la escuadra vitoriana como el escenario para sumar el primer triunfo del curso en casa y poder así escalar posiciones en la clasificación. 

El Mallorca, además, disputó el pasado miércoles su encuentro aplazado ante el Cádiz, que se resolvió con un empate que no satisfizo los intereses bermellones. Luis García, eso sí, advirtió en la previa del partido que el conjunto balear obligará a los suyos a plasmar una actuación de extrema fiabilidad en las dos áreas.

El técnico madrileño puso el foco en el sello de Javier Aguirre, quien ha impregnado un estilo de juego directo y extremadamente físico en sus filas. También alertó sobre el poderío aéreo de un anfitrión balear que, eso sí, añorará a su mejor artillero ante el Alavés. 

Aguirre, en el alambre

La sensible baja por lesión de Muriqi, ligada a la mala dinámica de resultados (dos empates en los últimos cinco partidos), ha encendido las alarmas en la entidad de Son Moix, que realizó una importante inversión en el pasado mercado estival tras la venta de Kang-in Lee por 22 millones de euros. Si el Glorioso obtiene un buen resultado, las horas del técnico mexicano podrían estar ya contadas al frene de los baleares.

El Mallorca se reforzó en la última ventana de traspasos con los nombres de Cyle Larin y Sergi Darder, quienes tratan de asentarse en el esquema táctico de Javier Aguirre. No obstante, la marcha de Ruiz de Galarreta dejó una vacante en el centro del campo que ahora trata de subsanar el ex del Espanyol, un futbolista diferencial en la sala de máquinas.

Sin llegar a dar pistas durante su comparecencia de prensa, cabe recordar que Luis García ha apostado en los últimos compromisos por prolongar el soberbio estado de forma de Samu Omorodion. El potente ariete albiazul promedia un gol cada 120 minutos y, más allá de sus notables cifras de cara a portería, lo cierto es que su presencia genera nerviosismo a cualquier defensa rival.

El Deportivo Alavés ha evolucionado a pasos agigantados desde que arrancó la temporada en Cádiz. De hecho, Luis García ha logrado un notable equilibrio entre todas las líneas y la dinámica de resultados en Mendizorroza ha dado alas al equipo. Con un margen de siete puntos respecto a la zona más delicada de la clasificación, el objetivo de la expedición vitoriana no es otra que aumentar el colchón y afrontar la recta de diciembre con cierta tranquilidad.

A corto plazo, el Glorioso tiene por delante la ardua tarea pendiente de desprenderse de la pesada losa a domicilio. Y es que el equipo vitoriano ha demostrado ser capaz de competir de tú a tú ante cualquier rival, pero los resultados positivos no han acabado de cuajar lejos de Vitoria. Así lo demostró en las visitas a Villarreal y Barcelona, donde a pesar de sumar un único punto, el albiazul mostró sus credenciales de conjunto serio y trabajado.