El Deportivo Alavés visita hoy el estadio de Balaídos con el objetivo de redimirse de las dos últimas derrotas y, también, rubricar el primer triunfo lejos de Mendizorroza. Los pupilos de Luis García, inmersos en la jornada intersemanal, se miden a un rival, el Celta, que afronta la séptima fecha del campeonato con el desafío de escapar de la zona roja de la clasificación tras un decepcionante comienzo de temporada.

El duelo entre el Alavés y el Celta apunta a ser de alta tensión dadas las dinámicas de ambos equipos. El conjunto celeste, con dos puntos menos que el Glorioso, es el conjunto que limita actualmente la zona de descenso de la máxima categoría. No en vano, para tratar de reconducir su rumbo el cuadro vitoriano vivirá otra prueba de madurez en un estadio de recuerdos dispares para la parroquia albiazul. 

No obstante, los hombres de Rafa Benítez también quieren desquitarse de su negativa racha en Balaídos. El Celta, hasta la fecha, no ha sumado ningún punto en casa. Salió apeado ante el Mallorca, Real Madrid y Osasuna, una racha que señala al Alavés como el punto de inflexión para hacer de su remodelado estadio un fortín.

Cambios en el once

El duelo que se vivirá en las próximas horas en Vigo coincide con la primera jornada intersemanal del curso, un contexto que suele propiciar la entrada de nuevos futbolistas en los esquemas de cada equipo. En clave albiazul, teniendo en cuenta que el derbi ante Osasuna se disputará este domingo, con escasos días de margen para el descanso y la recuperación física, todo apunta a la entrada de jugadores que dosifiquen los esfuerzos de los más habituales.

Partiendo desde la retaguardia, el duelo ante el Celta se traduce como el escenario ideal para la irrupción en el once de zagueros como Javi López, Tenaglia y Rafa Marín, quienes no han tenido protagonismo en estas primeras jornadas. El lateral canario parece predestinado a sustituir al omnipresente Duarte, que pese a estar disponible para el partido, tal y como aclaró Luis García, es uno de los futbolistas con más minutos disputados en el Alavés. Mientras tanto, el prometedor Marín se postula como un hombre de garantías para reemplazar a un irregular Abqar en el eje de la zaga y Tenaglia puede hacer lo propio con Gorosabel en el costado derecho.

El centro del campo también es susceptible de sufrir cambios en Balaídos. En la última jornada ante el Athletic, el doble pivote formado por Benavídez y Guevara no funcionó tanto en la contención como en la creación de juego, pero el duelo ante el Celta es un escenario opuesto al del derbi, puesto que la sala de máquinas celeste no reúne las mismas cualidades que el centro del campo del conjunto bilbaíno. Así, la continuidad de jugadores como Hagi o Guridi puede propiciar recorrido y último pase al Alavés, necesitado de clarividencia y precisión en los últimos metros.

El conjunto vitoriano también debe dar un paso al frente en sus carriles. En los dos últimos compromisos ligueros, la única amenaza ofensiva ha sido la de Álex Sola, quien ha asumido el papel del extremo desequilibrante y encarador. Ante el Celta, eso sí, se abre la ventana para otros futbolistas con menor protagonismo como Alkain o incluso Abde, con el simple papel de revulsivos en las últimas jornadas.

El centro de la delantera, donde Kike García es la indiscutible referencia en la punta de lanza, también puede requerir variaciones para dosificar los minutos en esta jornada intersemanal. En este sentido, los nóveles Karrikaburu y Omorodion se encuentran, a priori, ante una oportunidad para reivindicarse y demostrar sus capacidades para competir en la máxima categoría.

Ahora bien, enfrente del conjunto albiazul se encuentra un rival que, tras verse remontado ante el Barcelona sobre la bocina, tiene la imperiosa necesidad de volver a sumar un triunfo balsámico. Pese a que el Celta esté confeccionado para luchar por unos objetivos diferentes a los del Alavés, la realidad es que ambos luchan en la actualidad por la misma meta, que no es otra que alejarse de la zona roja. 

La visita al conjunto de Rafa Benítez, compuesto por jugadores diferenciales como Iago Aspas, Bamba o Larsen, obliga al cuadro albiazul a recuperar la fiabilidad lejos de Mendizorroza para lograr un triunfo que permita afrontar el próximo derbi con la moral fortalecida.