“Mendizorroza es especial”. Así lo manifestó Luis García Plaza en su comparecencia previa al partido contra el Sevilla en la vuelta del fútbol de Primera al templo albiazul.

Y el pasado lunes se pudo comprobar que el técnico madrileño sabe de lo que habla.

En una nueva jornada mágica, el Deportivo Alavés hizo vibrar a su afición mediante un ejercicio de esfuerzo y valentía que, junto a los goles de Luis Rioja, Rubén Duarte y Kike García (x2), fue más que suficiente para superar a todo un Sevilla (4-3) y cosechar así el primer triunfo del curso.

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En imágenes: todas las fotos del Alavés frente al Sevilla en Mendizorroza Iñigo Foronda

Luis García Plaza no ha escatimado en elogios a la afición albiazul en el tiempo que lleva al frente del Glorioso, poniendo en valor el apoyo durante los 90 minutos que brinda la hinchada al equipo en cada partido y en cada desplazamiento.

Ante el reto del debut en La Liga contra el poderoso Sevilla, el entrenador quiso transmitir a sus jugadores la importancia de aprovechar ese apoyo para competir de tú a tú contra el resto de rivales de la máxima categoría.

En una emotiva arenga en los minutos previos a saltar al césped que ha difundido el club en sus redes sociales, Luis García Plaza intentaba tocar la fibra sensible de sus pupilos.

Ahora, con la difusión pública de unas palabras que no suelen salir de la intimidad del vestuario, esa emoción ha llegado a muchos aficionados que valoran positivamente que desde dentro del equipo se valore el ánimo que brindan al equipo siempre.

"¿Sabéis lo que nos va a dar esta gente?", arranca preguntando el técnico a su grupo, que le escucha sentado en el vestuario, en el video publicado por el club.

"Para nosotros aquí es una fiesta cada vez que jugamos. Si el equipo va, si el equipo compite, si el equipo transmite y va a por el partido, estos se nos vuelcan", afirmaba en referencia a la afición alavesista.

"Porque sabéis que se nos vuelcan, que nos dan todo lo que tienen", insistía Luis García Plaza minutos antes de medirse al Sevilla de Mendilibar.

La arenga continuaba apelando a la confianza en las virtudes del equipo y de cada uno de los jugadores: "Que demos un paso adelante individualmente, que tenemos jugadores. Yo soy entrenador de Primera, que tú eres un jugador de Primera División".

Unas palabras que a tenor de lo mostrado por el Alavés sobre el terreno de juego surtió efecto.