Era un secreto a voces, pero hoy, 30 de junio de 2022, ha llegado la confirmación. Tras 14 años como albiazul, en los que fue subiendo escalones hasta alcanzar y consolidarse en el primer equipo, Martín Aguirregabiria abandona el Deportivo Alavés, donde no han mostrado demasiado interés en renovarle, en busca de nuevos retos. Algo que también van a hacer Ximo Navarro, Tomas Pina, Pere Pons, Edgar, Guidetti  y Joselu, cuyos contratos con la entidad del Paseo de Cervantes, al igual que el del lateral gasteiztarra, ya son historia.

Martín, de 26 años, se estrenó con el Glorioso en la temporada 2017-18, cuando Javi Cabello le alineó en la eliminatoria copera frente al Deportivo, y ahí empezó a distinguirse como la irrupción más importante de la cantera desde Óscar De Marcos e Igor Martínez. A partir de ese momento, ya con el Pitu Abelardo en el banquillo de Mendizorroza, el gasteiztarra aprovechó la confianza que le brindó el técnico gijonés y se hizo con un puesto en el once por delante del veterano Alexis Ruano y la promesa Carlos Vigaray.

Una titularidad que también se mantuvo la siguiente campaña, en la que el Alavés peleó por Europa durante muchos meses, y que le sirvió al lateral albiazul para recibir la llamada de la selección española, con la que se proclamó campeón del Europeo sub-21. Sin embargo, lo que vino después no fue un camino de rosas y Martín, al igual que el propio equipo, fue perdiendo brillantez con el paso de los meses –sobre todo, tras el parón por el covid-19– hasta ser relegado al banquillo.

En resumen, Martín abandona su casa tras 138 encuentros –24 de ellos el curso pasado–, dos goles y ocho asistencias con la primera plantilla y, de esta manera, deja al Glorioso sin representación vitoriana –es decir, de alguien que siente los colores de verdad– en el vestuario. Algo que ya fue motivo de preocupación el pasado verano, cuando se dijo adiós al gran capitán Manu García, y que ahora puede extenderse durante varios años si nadie irrumpe desde abajo.

NO SE DESCARTA LA CONTINUIDAD DEL KÁISER

Quien, al contrario que los anteriores, aún tiene opciones de seguir en Mendizorroza es Víctor Laguardia. Según ha confirmado el club babazorro en su comunicado, el káiser maño se encuentra en "compás de espera", por lo que no es inviable que ambas partes terminen alcanzando un acuerdo. Ahora bien, esto último no será fácil, pues, además del interés mostrado por otros equipos de la categoría, las negociaciones continúan en stand by a causa de las discrepancias surgidas durante el propio proceso.