Los entrenadores de fútbol explican que para que un equipo pueda crecer la principal fortaleza reside en el colectivo. Julio Velázquez repite esta consigna en cada rueda de prensa y, en este sentido, le otorga un gran valor a la unión del vestuario, que es clave para afrontar situaciones tan complicadas como la que ahora atraviesa el Alavés.

Sin embargo, a pesar de que el fútbol sea un deporte de grupo, los equipos suelen contar con jugadores diferenciales y, si se pregunta a algún aficionado neutral por un futbolista del Alavés y del Celta, probablemente los nombres que arrojaría no serían otros que el de Joselu Mato y Iago Aspas.

Estos dos futbolistas son pilares fundamentales en sus equipos y, además, el poderío ofensivo tanto del Celta como del Alavés pasa por sus botas. Aspas y Joselu son los máximos goleadores de sus equipos con una diferencia abrumadora respecto a sus compañeros y la dependencia sobre ellos es de tal magnitud que, si no atraviesan una buena racha goleadora, el conjunto se resiente y le cuesta más de lo debido obtener buenos resultados.

De los 28 goles que ha anotado el Glorioso en el campeonato doméstico 13 llevan la firma de Joselu, quien también ha ofrecido otras cuatro asistencias. Es decir, el ariete de Stuttgart incide directamente en el 60% de los tantos del Alavés. Además, el atacante albiazul es el futbolista más poderoso por arriba de la liga, lo que le convierte en un jugador a seguir ya que su contrato en Vitoria concluye en junio. Las malas lenguas aseguran que ya ha fichado por el Espanyol.

Este porcentaje arroja una conclusión preocupante para el club afincado en el Paseo de Cervantes ya que el resto de atacantes albiazules apenas han incidido en el gol. El segundo máximo artillero del Alavés es Escalante con cuatro dianas y le sigue Laguardia con otras tres. Son dos futbolistas cuyas principales virtudes no residen, precisamente, en el poderío en tareas ofensivas.

Una de las diferencias entre el Celta y el Alavés se encuentra, también, en el registro goleador. El cuadro vigués dispone de futbolistas de buen pie y con gran facilidad para martillar la portería rival y, en este sentido, para poder paliar la dependencia sobre Iago Aspas, Coudet cuenta con jugadores como Santi Mina, Brais Méndez o Franco Cervi. El primero de ellos es el segundo máximo goleador celeste con siete dianas y Brais Méndez es una pieza clave debido a su capacidad para asistir a los compañeros y ver portería con una gran frecuencia.

La veteranía de Iago Aspas y Joselu es un factor de especial ayuda para los compañeros. Ellos dos son los pilares de sus respectivos equipos y, por eso mismo, asumen responsabilidades de extrema complejidad como los lanzamientos de penalti. Tres de los 15 goles de Iago Aspas han sido desde los once metros y seis de los 13 anotados por Joselu también han sido desde dicha posición.

Es evidente que el principal objetivo de Joselu para las últimas cuatro jornadas del campeonato doméstico no es otro que lograr la permanencia. Así lo ha explicado en numerosas ocasiones a lo largo del curso y jamás ha escondido su deseo de que el Alavés continúe en la élite por un año más antes de emigrar a otro lugar.

Sin embargo, la lucha por hacerse con el Zarra también puede servir como un aliciente para el atacante albiazul, quien se encuentra a dos goles de diferencia del líder Raúl de Tomás. Joselu es el cuarto máximo artillero nacional con 13 dianas, una menos que Juanmi y dos menos que Iago Aspas y De Tomás.

La visita a Balaídos será, a todas luces, un partido atractivo para el aficionado neutral y, también, una final para la parroquia babazorra. Las posibilidades para que el Alavés mantenga la categoría pasan por lograr los tres puntos en el feudo celeste y, para ello, Velázquez necesitará el máximo por parte de sus pupilos.