El entrenador del Deportivo Alavés, Javier Calleja, se mostró preocupado por el estado de su equipo y, en particular, el aspecto mental de los suyos, ya que “cualquier situación en contra nos hace mucho daño y eso es lo primero que tenemos cambiar. Tenemos que superarnos y no agachar la cabeza, porque si no somos fuertes mentalmente los 90 minutos será difícil; cualquier jugada puede ser decisiva”. El técnico albiazul también destacó que “cuando no puntuas es una losa demasiado grande, en especial, cuando vas con el marcador en contra. Aún así, creo que hemos tirado de fe y hemos luchado hasta el final, pero no hemos encontrado ni las ocasiones ni el gol”. En sus declaraciones, el entrenador se mostró muy reiterativo en que ellos mismos y todos juntos son los únicos que pueden cambiar la situación y para ello hay que cambiar la mentalidad. “Con un buen comienzo de partido no nos vale, porque al primer revés que sufrimos, el equipo baja el pistón. Nos cuesta competir y creer en nosotros mismos”.

Eso sí, Calleja afirmó tener el respaldo del club y confirmó que después del encuentro habló tanto con Josean Querejeta como con Alfonso Fernánde de Trocóniz y Sergio Fernández para demostrar que “entre todos vamos a sacar esto adelante, porque de peores situaciones hemos salido y lo vamos a conseguir”.

Respecto al encuentro, el preparador admitió que “el equipo empezó a encadenar varias situaciones de mal juego y eso provocó varios errores.” Eso sí, también se mostró optimista con el final de la primera parte. “Tristemente no se le dio continuidad, porque cualquier error o jugada en contra nos penaliza demadiaso. Por eso mismo debemos cambiar la dinámica y eso se hace siendo fuertes mentalmente”.

Calleja tuvo palabras para la afición y “entendió su disgusto, ya que iban al campo con ganas de ver un buen partido y no hemos conseguido concectar con ellos. Porque esto es un juego y podemos ganar o perder, pero nunca nos puede fallar la intensidad”. El técnico quiso terminar la rueda de prensa con un mensaje optimista afirmando que no “hay tiempo para lamentos y que el equipo se levantará y sacará la situación”.