La de Antonio Karmona es, sin duda, una de las voces más autorizadas para hablar del Deportivo Alavés. Durante las siete inolvidables temporadas en las que defendió la camiseta albiazul el central de Bermeo tuvo que enfrentarse a situaciones de todo tipo. Algunas incluso más complicadas que la que en la actualidad amenaza a la escuadra de Mendizorroza. Portando el brazalete de capitán y con su actuación sobre el césped fue uno de los responsables de que el plantel gasteiztarra pudiese superar esos momentos complicados.

Como en la temporada 1998-99, la del regreso a la Primera División tras más de cuatro décadas, cuando a falta de diez jornadas el alavés ocupaba plaza de descenso a cuatro puntos de la salvación y terminó consiguiendo la permanencia en el dramático derbi ante la Real Sociedad que bajó el telón al curso. Desde esa experiencia, Karmo ofrece las claves para que este año el desenlace pueda ser igual de feliz. "El equipo tiene que ser uno. Aislarse del exterior para que nada influya en el vestuario y hacerse fuerte en los enfrentamientos directos con los equipos implicados en el descenso porque son clave", significa.